Locatarios de Medrano dijeron que no están interesados en afiliarse al programa “Aquí hay lugar” que comenzará a operar en la zona a partir del 21 de noviembre, principalmente porque consideran que provocaría desatención hacia sus clientes.“Ya nos vinieron a decir pero hasta ahorita no sé de nadie que haya aceptado, aunque quizá más adelante se animen”, explicó el dueño de una tienda de ropa.Los cajones de parquímetros virtuales ya están balizados en la calle Federico Medrano, desde Edison hasta Hernando de Martell. También hay estacionamientos para bicicletas, motocicletas y lugares para personas con discapacidad.En un recorrido por la zona se observó que los puntos viales más conflictivos son las calles de Irineo Paz, José María Lafragua, Fray Antonio de Segovia y Motolinía, de la 56 a la 62, debido a que los comerciantes ambulantes obstruyen las vialidades con sus puestos. En ese punto no hay balizamiento de parquímetros virtuales y los autos se estacionan en batería.Valeria Huérfano, directora de Movilidad del Ayuntamiento de Guadalajara, dijo esta semana que ya había entre cinco y 10 negocios afiliados en Medrano, de 22 locales que requieren como mínimo. En total hay 220 cajones.Los parquímetros virtuales funcionarán de las 10:00 a las 20:00 horas, de lunes a sábado. No operarán domingos ni días festivos. El costo es de siete pesos la primera hora y a partir de la segunda hora incrementa un peso. Las personas pueden pagar mediante la aplicación Parkimóvil, mensaje SMS o en un negocio afiliado.Cinco apartalugares de la Zona del Vestir de Medrano advirtieron que no se irán pese a la llegada de los parquímetros virtuales. Francisco Castillo señaló que desde 1992 acude a Medrano a cuidar lugares, dijo que aunque exista el programa “Aquí hay lugar” él seguirá en el espacio aunque sea lavando coches. Aseguró que nadie del Ayuntamiento de Guadalajara ha ido a ofrecerle trabajo. “Pero yo ya estoy viejo, en ninguna empresa me aceptan, podría irme de cargador pero ya no aguanto”.José Ramírez, quien también lleva muchos años en la misma labor, agregó que ellos no exigen dinero a la gente y que no puede dedicarse a otra cosa porque padece de ataques epilépticos.Los compradores opinaron que en general será una buena medida porque ya pagan mucho en estacionamiento y hay desorden vial, aunque resaltaron su preocupación debido a que no conocen el funcionamiento de “Aquí hay lugar”. Margarita Álvarez contó que no usa celular. “Sería mejor que pusieran el espacio físico para pagar, como estaba antes”.Óscar Patiño, quien usa aparatos especiales para moverse, aplaude que haya espacios para personas con discapacidad y espera que los “viene-viene” dejen de cobrar hasta 20 pesos por buscarle un lugar. “Yo casi no encuentro lugar para mí. El único beneficio es que ya no te cobren”.
