Este martes comenzó la campaña de vacunación más importante de la historia en Reino Unido, donde una abuela británica se convirtió en la primera persona en recibir la vacuna de Pfizer y BioNTech contra el coronavirus.Pero la nota curiosa se la llevó el hombre que fue el segundo turno en el inicio de la vacunación, pues cuando se menciona su nombre no puede evitarse esbozar aunque sea una ligera sonrisa o un sentimiento de incredulidad.William Shakespeare, un hombre de 81 años homónimo del dramaturgo padre de la lengua inglesa, fue el segundo en recibir la vacuna contra el COVID-19 en Reino Unido y tras su aplicación se declaró "encantado".Las imágenes del Shakespeare contemporáneo emocionaron visiblemente al ministro de Sanidad, Matt Hancock, mientras aparecía en directo en la televisión: "el año ha sido tan difícil para tanta gente", afirmó.El Reino Unido, primer país occidental que comenzó a vacunar a su población contra el coronavirus, decidió dar prioridad a los ancianos, sus cuidadores y al personal sanitario.Entre aplausos y gritos de júbilo, fue Margaret Keenan, a punto de cumplir los 91 años y vestida con una camiseta con motivos navideños, quien recibió la primera dosis en un hospital de Coventry, en el centro de Inglaterra."Me siento muy privilegiada por ser la primera persona en ser vacunada contra el covid-19, es el mejor regalo de cumpleaños que hubiera podido esperar", declaró esta mujer, exempleada de una joyería con dos hijos y cuatro nietos, rodeada de cámaras de televisión.El Reino Unido, es el país de Europa más castigado por la pandemia, con más de 62 mil muertos, fue la primera nación occidental en autorizar el uso de una vacuna.Rusia comenzó a administrar la suya, denominada Sputnik V, el pasado fin de semana y en China se suministró una vacuna experimental a un grupo muy pequeño de la población. Estados Unidos y la Unión Europea esperan aún la aprobación de sus reguladores.Gracias a la vacuna "ahora tenemos un poco de esperanza", dijo a la AFP John Bottomly, un jubilado de 78 años, frente al Royal Preston Hospital de Lancashire, en el noreste. "Vamos a decirle goodbye a este virus asesino", agregaba.Pero no todos son tan entusiastas. "Para ser franco no me la voy a poner yo ni nadie en mi familia, muchos son escépticos, creo que tal vez dentro de un año esta vacuna podría acabar provocando problemas más que soluciones", reconocía Barry Maxwell, un carpintero de 37 años, en Edimburgo.El orden de vacunación proseguirá por grupos de edad regresivos, hasta los mayores de 50 años. Las autoridades esperan haber vacunado a todas las personas vulnerables hacia abril.Será "una carrera de fondo no de velocidad" advirtió el director médico de la sanidad pública británica, Stephen Powis.El Reino Unido ha comprado 40 millones de dosis a Pfizer/BioNTech, suficientes para 20 millones de personas.Es menos de un tercio de su población (66.5 millones), pero el país cuenta con la próxima autorización de otras vacunas, especialmente la británica de AstraZeneca/Oxford, de la que tienen reservadas 100 millones de dosis.