El esfuerzo global para salvar especies y ecosistemas bajo peligro de extinción mayormente ha fracasado debido a que hábitats frágiles como los arrecifes de coral y los bosques tropicales están más amenazados que nunca, dijeron investigadores.En 2010, más de 150 países acordaron objetivos para proteger la naturaleza, pero un estudio de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) descubrió que el mundo prácticamente no ha logrado cumplir con 20 objetivos diferentes para salvaguardar especies y ecosistemas. Seis de esos objetivos se "alcanzaron parcialmente”, el resto no.“Si esto fuera una escuela y fueran exámenes, el mundo habría reprobado”, dijo Elizabeth Maruma Mrema, secretaria ejecutiva de la Convención de Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica, que publicó el informe.Inger Andersen, quien dirige el programa ambiental de la ONU, lo calificó como un fracaso global."Desde el COVID-19 hasta los incendios forestales masivos, las inundaciones, el derretimiento de los glaciares y el calor sin precedentes, nuestra incapacidad para cumplir con los objetivos de biodiversidad, de proteger nuestro hogar, tiene consecuencias muy reales. Ya no podemos permitirnos el lujo de dejar a un lado la naturaleza", apuntó Andersen.El exsecretario general de la ONU Ban Ki-Moon relacionó los problemas con "una falta de asociación global y liderazgo político". Dijo que el multilateralismo ha sido atacado, citando como ejemplo la salida de Estados Unidos del acuerdo de París sobre cambio climático.