El presidente estadounidense, Donald Trump, se asomaba el fin de semana al final de su juicio político, cuyo resultado promete envalentonarle de cara a las elecciones de noviembre y atarle todavía más a un Partido Republicano que ha aparcado por completo sus dudas sobre el mandatario.Con la comparecencia de testigos como el ex asesor presidencial, John Bolton, descartada en una ajustada votación el viernes, no se esperan nuevos baches que impidan que, en otro voto en el Senado el próximo miércoles, Trump quede absuelto de los dos cargos que enfrenta por sus presiones a Ucrania.Consciente de que sólo un milagro podría hacer que una veintena de republicanos cambie de bando y den a los demócratas la mayoría de dos tercios que necesitan para destituirle, Trump confía en que el resultado del impeachment refuerce sus opciones de reelección, en un país aún más polarizado que al inicio del proceso.