El presidente de Estados Unidos Donald Trump dijo este miércoles que quiere que la cumbre del G-7 prevista para junio se realice de forma presencial en la residencia de Camp David, como un símbolo de un retorno a la "normalización".Después de que a mediados de marzo anunció que el encuentro se realizaría de forma virtual debido al coronavirus, el miércoles Trump mencionó la posibilidad de reunirse en persona en la residencia de Camp David, un lugar cargado de simbolismo.A menos de seis meses de las elecciones presidenciales, Trump que defendió la expansión económica como uno de los grandes logros de su mandato, aboga por una reapertura de los negocios prometiendo que 2021 será un año "increíble"."Ahora que nuestro país está en transición para volver hacia la grandeza, estoy considerando reprogramar el G-7 para la misma fecha o una similar en Washington, en el legendario Camp David", afirmó."Los otros miembros (del G-7) han emprendido también su regreso. Sería un símbolo maravilloso para todo el mundo. ¡Normalización!", añadió.A mediados de marzo, debido a la pandemia, la Casa Blanca renunció a celebrar esa cumbre en presencia de los jefes de Estado del G-7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) y se mostró a favor de realizarla por videoconferencia.Un encuentro de este nivel permitiría a Trump posicionarse en la escena internacional y enviar un mensaje de fortaleza, tras haber sido muy criticado por la gestión de la pandemia, que en Estados Unidos dejó la mayor cantidad de fallecidos a nivel mundial, con más de 90 mil víctimas mortales.También le ofrecería una tribuna con un altavoz para su pugna con China, a quien responsabiliza de la pandemia y acusa de no haber reaccionado a tiempo cuando se detectó el virus a final del año pasado en la ciudad de Wuhan y, además, la critica por su supuesta falta de transparencia.El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo estar "dispuesto" a viajar "si las condiciones sanitarias lo permiten"."El G-7 es una gran cita" internacional, añadió la presidencia francesa, que el año pasado organizó la cita en el balneario atlántico de Biarritz.JM