La guerra de picantes fue la responsable de quitarle la vida a un joven que al ingerir un totopo le provocó la muerte de una manera súbita y sumamente incómoda. El hecho ha causado polémica en la comunidad de Massachusetts y ahora se ha vuelto tendencia debido a los resultados que arrojó la autopsia.Harris Wolobah, un adolescente de 14 años, sufrió un paro cardio pulmonar al ingerir este alimento que contenía una sustancia llamada capsaicina", se lee en el resultado de la autopsia, al que tuvo acceso la AFP.La capsaicina es una molécula irritante y neurotóxica para las personas, presente en algunos ajís o chiles picantes.De acuerdo a la prensa local, aunque el hecho sucedió hace un año en la ciudad de Worcester, es necesario concientizar a la población del contenido de este tipo de productos, los cuales tienen en su leyenda "un chip de tortilla negro mortal" acompañado de un envoltorio que muestra un féretro con una calavera roja en llamas.Dichos chips llevan chiles del tipo Carolina Reaper, que están en la escala más alta de los picantes.Según la autopsia, el joven sufría patologías cardiovasculares, como una "cardiomegalia", es decir, un corazón aumentado que podrían haber contribuido a su muerte.La prensa local cita informes de adolescentes que se han enfermado después de ingerir este alimento en el país. En California, tres estudiantes tuvieron que ser hospitalizados y en Minnesota siete estudiantes se enfermaron tras participar en un desafío para ingerir los totopos picantes.SM