Dos aviones militares despegaron el jueves desde Australia y Nueva Zelanda con los primeros envíos de ayuda humanitaria para Tonga, cinco días después de la erupción volcánica y el tsunami que devastaron este archipiélago en el Pacífico.Responsables en Australia y Nueva Zelanda confirmaron que el despegue de dos naves de cargamento que deberían aterrizar en las próximas horas en el aeropuerto de Tonga, recientemente limpiado de ceniza volcánica.Un "C17 Globemaster despegó de la base aérea de Amberley sobre las 07:00 de hoy", dijo un responsable australiano de Defensa. Está previsto otro vuelo australiano este jueves.Nueva Zelanda confirmó que un Hercules C-130 también estaba de camino, después de varios días de retrasos.Los vuelos van cargados con suministros humanitarios y equipamiento de comunicaciones para el archipiélago del Pacífico, casi aislado del mundo después de la erupción y el tsunami, que dañó un cable submarino de telecomunicaciones internacionales.Debido a este suceso, las noticias desde el país han sido muy limitadas desde el sábado y el balance de daños es impreciso. Por el momento se han confirmado tres muertos por la erupción y el tsunami, cuyo oleaje llegó hasta las costas de Chile o Estados Unidos.En Perú, este oleaje anómalo causó la muerte de dos mujeres y un derrame de seis mil barriles de petróleo que ha puesto en peligro la flora y la fauna del litoral de la provincia de Callao.En Tonga, los trabajos en los últimos días se centraron en limpiar la pista del aeropuerto internacional para permitir el aterrizaje de aviones con ayuda humanitaria.El coordinador de crisis de Naciones Unidas Jonathan Veitch dijo el miércoles por la noche a AFP que la pista del aeropuerto de la isla principal, que quedó cubierta de una capa de 5 a 10 centímetros de ceniza, ya estaba operativa.Estas partículas de polvo pueden ser venenosas y suponen también un peligro para las aeronaves, puesto que pueden acumularse en sus motores y provocar fallos en su funcionamiento.El gobierno de Tonga señaló que el fenómeno natural causó "un desastre sin precedentes", con olas que llegaron hasta los 15 metros de altura y destruyeron numerosas poblaciones en las islas cercanas al volcán Hunga Tonga Hunga Ha'apai.Más del 80% de sus 100 mil habitantes se vieron impactados por el desastre, indicó Naciones Unidas el miércoles, señalando que había una necesidad urgente de agua potable dado que la erupción volcánica contaminó las reservas del archipiélago."Las provisiones de agua en Tonga se han visto gravemente impactadas por la caída de ceniza y el agua salada del tsunami", dijo Katie Greenwood, de la Federación Internacional de Cruz Roja, alertando del riesgo de enfermedades como el cólera o la diarrea.Además de los envíos aéreos, tanto Australia como Nueva Zelanda mandaron dos buques militares hacia el archipiélago con reservas de agua y una planta desalinizadora con capacidad de filtrar 70 mil litros diarios. Su llegada está prevista el viernes.Australia también tiene listo para zarpar de Brisbane el barco HMAS Adelaide con "equipo de purificación de agua y provisiones humanitarias adicionales", dijo el primer ministro Scott Morrison el miércoles.China afirmó igualmente que enviaría material de emergencia hacia Tonga, cuyo presidente parlamentario Fatafehi Fakafanua aseguró entre lágrimas que "toda la agricultura está arruinada".La erupción ha sido una de las más potentes en décadas recientes, lanzando una ola de presión que atravesó el planeta a una velocidad supersónica de mil 230 kilómetros por hora, indicó el Instituto Nacional de Investigación Marina y Atmosférica de Nueva Zelanda.Aunque las comunicaciones internas en el país han sido parcialmente restablecidas, la conexión con el exterior puede seguir interrumpida durante largo tiempo debido a que la reparación del cable submarino roto necesitará al menos cuatro semanas.MF