"La verdad venció", dijo este jueves el presidente brasileño Michel Temer en un video publicado en las redes sociales luego de que la Cámara de Diputados bloqueara en la víspera una segunda denuncia por corrupción en su contra.Los diputados pusieron punto final en la noche del miércoles a cinco meses de zozobra política por las graves acusaciones que le hizo la Fiscalía General al presidente de liderar una asociación ilícita para desviar fondos públicos, obstruir el trabajo de la justicia y por corrupción pasiva.Durante la tarde de esa intensa jornada, Temer, de 77 años, debió ser hospitalizado transitoriamente por un problema urológico.En su mensaje, el presidente apareció en buena forma y señaló que la economía será su mayor prioridad. Además, dejó abierta la puerta a las negociaciones para aprobar su principal desafío: una controvertida reforma de las jubilaciones que exige una enmienda constitucional."La economía volvió a crecer después de la mayor recesión de nuestra historia. Esa es la mayor obra de mi gobierno (...) Haremos aún más, con ayuda del Congreso", señaló antes de agradecer a los diputados por su voto.Nuevo mantraLa mejora económica de Brasil es el nuevo mantra del Palacio de Planalto, que busca consolidar la continuidad de su proyecto de corte liberal de cara a las elecciones de octubre de 2018.Durante su tiempo en el poder, Temer se sostuvo en una alianza tejida con un Congreso desprestigiado, a la que sus detractores definen como una fuente de corrupción y dádivas con fondos públicos a cambio de apoyo.El presidente espera que esa coalición pueda presentar un candidato conjunto, ya que difícilmente su partido, el PMDB, tenga un aspirante propio, una marca que ha caracterizado a la mayor fuerza política de Brasil. El propio Temer llegó a la jefatura del Estado desde la vicepresidencia, cuando fue destituida la izquierdista Dilma Rousseff que encabezó la fórmula presidencial de las últimas dos elecciones y luego devino en su rival.La Cámara baja blindó al mandatario y frenó las investigaciones por 251 votos a favor y 233 en contra, un triunfo con margen ya que para autorizar a la corte suprema a examinar la denuncia se requerían 342 de los 513 escaños de la Cámara baja. Para bloquearla, bastaban 172 votos.Pero la merma en el apoyo de sus aliados (la votación anterior fue 263 a 227) abre interrogantes acerca de si podrá impulsar las impopulares reformas que reclama el mercado.El legislador oficialista Darcísio Perondi afirmó que esa iniciativa estará en votación en noviembre gracias a un acuerdo con el presidente de la Cámara, Rodrigo Maia (DEM, derecha), hombre clave para cualquier proyecto sensible y que en los últimos días había tenido desavenencias públicas con el gobierno."Si bien el gobierno no consigue capitalizar la mejora de la economía por los escándalos de corrupción, su razón de ser, según dice Temer, es reencauzar la economía (...) Aún tiene condiciones para aprobar alguna reforma en el sistema de jubilaciones", señaló Moura.