El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, se mostró este viernes confiado en que tanto los aliados europeos como el Congreso estadounidense seguirán apoyando el envío del armamento necesario para que Ucrania afronte la invasión rusa."Hemos visto muchas informaciones prematuras sobre la disolución de la coalición (que apoya a Ucrania). Pero está pasando todo lo contrario. No solo permanecemos unidos, sino que nos estamos fortaleciendo", expresó en una charla en la Universidad de Chicago.Los ministros de Defensa de Estados Unidos y de varios países europeos no lograron adoptar en una reunión en Ramstein (Alemania) este martes una decisión acerca del envío de los tanques Leopard 2 de fabricación alemana, que reclama Kiev."Este es un proceso que sigue abierto. Es una decisión soberana de los países. Cada país contribuye con diferentes aportaciones en cada momento", dijo al respecto el líder de la diplomacia estadounidense.Blinken señaló que Estados Unidos, el Reino Unido y Francia aprobaron el envío de carros de combate ligeros a Ucrania y que "otros países harán lo mismo".Afirmó además que el Senado estadounidense está apoyando el envío de armamento para el Gobierno de Kiev y que "pasa lo mismo si miran en los países europeos".Sobre la nueva Cámara de Representantes de Estados Unidos, dominada ahora por los republicanos, dijo que ha hablado con el nuevo presidente del Comité de Asuntos Exteriores, Mike McCaul, a quien definió como "un gran defensor del apoyo a Ucrania".Preguntado por la relación con China, el titular estadounidense de Exteriores dijo que es la "más compleja" que tiene Washington. Detalló que la política del Gobierno de Joe Biden consiste en "competir" con Pekín, pero de manera responsable para evitar un conflicto directo con el gigante asiático.Así han sido, según el secretario de Estado, las conversaciones que ha tenido Biden con su homólogo chino, Xi Jinping, y así será el acercamiento que tendrá Blinken durante el viaje que hará a China presumiblemente en febrero.Blinken subrayó que uno de los mayores objetivos de Estados Unidos es que se mantenga el statu quo en Taiwán, así como la "paz y la estabilidad" en la región.Y es que por el estrecho de Taiwán cruzan cada día más del 70% de los chips que se comercian en el mundo. "Si eso se interrumpiera, toda la economía mundial sufriría", advirtió.MF