El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, fue de los primeros en condenar la decisión de su homólogo ruso, Vladimir Putin de ordenar ataques militares contra Ucrania, por lo que el estadounidense convocó a una reunión del G7. A través de su cuenta de Twitter, Biden dijo que sostuvo una comunicación con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski en donde le “pidió que hiciera un llamado a los líderes del mundo para que hablaran claramente en contra de la flagrante agresión del presidente Putin y que apoyaran al pueblo de Ucrania”.Agregó: “El presidente Zelenskyy se acercó a mí esta noche y acabamos de terminar de hablar. Condené este ataque no provocado e injustificado de las fuerzas militares rusas. Le informé sobre los pasos que estamos tomando para lograr la condena internacional, incluso esta noche en el Consejo de Seguridad de la ONU”.Tras esta llamada, el mandatario estadounidense reiteró que mañana se reunirá con los líderes del G7 y otros aliados para imponer sanciones a Rusia. Por su parte, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau confirmó dicha reunión de líderes, pidiendo un “cese de inmediato todas las acciones hostiles y de provocación contra Ucrania y retire todas las fuerzas militares y de poder del país. La soberanía y la integridad territorial de Ucrania deben ser respetadas”.Sumando a la intención de Biden de sancionar a Rusia, Trudeau expuso en su cuenta de Twitter: “Estas acciones no provocadas son una clara violación adicional de la soberanía e integridad territorial de Ucrania y de las obligaciones de Rusia en virtud del derecho internacional y la Carta de la ONU”.Se trata del llamado Grupo de los Siete (G7), es un foro donde se reúnen las siete economías más industrializadas: Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos.Se creó en 1975 y este grupo se ha dedicado a lo largo de los años a determinar el rumbo del discurso multilateral y diseñar respuestas políticas a los retos mundiales como ahora es el caso del conflicto entre Rusia y Ucrania.