Río de Janeiro, la segunda Entidad brasileña más azotado por el coronavirus, inauguró el hospital de campaña construido en el mítico estadio Maracaná, que será destinado a la atención de pacientes con COVID-19 en estado de gravedad.El nosocomio, que operará en el área externa del estadio, fue construido en 38 días y ya tiene listas 170 de las 400 camas que tendrá. De los lugares ya disponibles, 50 son de terapia intensiva y 120 de enfermería.Según las autoridades de Río de Janeiro, las 230 camas restantes deberán ser entregadas hasta el 15 de mayo.El hospital brasileño, “comparado con lo que se hizo en China, en 30 días, tiene una complejidad aún mayor”, señaló el gobernador de ese Estado, Wilson Witzel.El secretario de Salud del Río de Janeiro, Edmar Santos, agregó que el complejo instalado en el Maracaná contará también con dos equipamientos de tomografía y diversos aparatos de ecografía, rayos X portátiles y de hemodiálisis.Además, dispondrá de computadoras para que los pacientes internados puedan conversar con sus parientes y amigos vía teleconferencia. “Esa novedad será muy importante para humanizar la atención a los pacientes del coronavirus en esta unidad”, expresó Santos.Río de Janeiro contabiliza, hasta el momento, mil 503 muertos y 15 mil 741 infectados, lo que llevó a las autoridades a prorrogar la cuarentena en toda la región hasta el 31 de mayo.EFELa epidemia de coronavirus causó 80 muertes en las últimas horas en Francia, el balance diario más bajo desde inicios de abril. La cifra total de fallecimientos subió 26 mil 310, informó la Dirección General de la Salud (DGS) gala. “La epidemia aún está activa y evoluciona, el virus circula en muchas zonas del territorio”, advirtió la DGS y llamó a mantener las medidas de higiene y de distanciamiento social.Pese a la baja de decesos, la Asamblea Nacional francesa aprobó la prolongación del estado de emergencia sanitaria hasta el próximo 10 de julio. El presidente de ese país, Emmanuel Macron, ya ha anunciado que recurrirá al Consejo Constitucional para un control de esa ley, mientras que los opositores expresan preocupación por las restricciones de las libertades públicas.