La Iglesia Católica en Australia posee un patrimonio valorado en 23 mil 491 millones de dólares estadounidenses (19 mil 122 millones de euros), una riqueza superior a la que declaró para estimar indemnizaciones para las víctimas de abusos, revela hoy una investigación periodística.Conforme a estos datos, el patrimonio supera al que la Iglesia Católica declaró ante la Comisión Real que investigó la respuesta de las instituciones a los abusos sexuales a menores bajo su cuidado, publican los medios del grupo Fairfax.Tras un trabajo de seis meses, los reporteros aseguran que la Iglesia valoró a la baja sus propiedades en los estados de Nueva Gales del Sur y Victoria con el argumento de que un aumento de las indemnizaciones a los menores abusados por miembros de su institución requeriría el recorte de sus programas sociales.Los periodistas del diario The Age, con sede en la ciudad de Melbourne, descubrieron que solamente en el estado de Victoria (sureste del país) esta institución posee bienes valorados en unos siete mil millones de dólares australianos (cinco mil 483 millones de dólares estadounidenses o cuatro mil 464 millones de euros).En todo el país, la Iglesia Católica posee unas mil 800 propiedades entre parroquias, presbiterios, escuelas, casa de ancianos, hospitales, oficinas, canchas de tenis y torres para telefonía móvil, además de seguros y fondos de inversiones, entre otros, que juntos sumarían casi 30 mil millones de dólares australianos (23 mil 491 millones de dólares estadounidenses o 19 mil 122 millones de euros)."Estas cifras confirman (...) que hay una gran desigualdad entre la riqueza de la Iglesia Católica y su respuesta a los supervivientes", dijo Helen Last, directora ejecutiva de la Fundación "In good faith".La ejecutiva recordó que las 600 personas registradas en su fundación por haber sido víctimas de los pederastas en el seno de la iglesia reciben "una indemnización mínima y una falta de cuidados integrales en relación a los abusos de la Iglesia".La comisión dio a conocer en febrero de 2017 que la Iglesia católica, con fuerte presencia en Australia, recibió quejas de cuatro mil 500 personas por presuntos abusos a menores cometidos por unos mil 880 miembros de esta institución, sobre todo por parte de sacerdotes entre 1980 y 2015, aunque algunos casos se remontan a la década de 1920.