La relación entre Estados Unidos (EU) y México en materia de seguridad podría entrar en una etapa de mayor exigencia de parte del primero al segundo en caso de que Donald Trump derrote a Joe Biden el 3 noviembre para renovar su cargo de presidente, destacó Alejandro Híjar-Chiapa, integrante de la Asociación Mexicana de Estudios Internacionales. Explicó que con tal escenario se fortalecerían las peticiones de mayores restricciones migratorias e incluso el republicano, de ser reelecto, podría impulsar una intervención más directa contra los cárteles que afecten los intereses de EU.Sobre la posibilidad de que el candidato demócrata llegue a la Casa Blanca, el especialista anticipó un cambio de discurso, aunque en la práctica Biden mantendría la línea de contención de la migración y defensa de posiciones estadounidenses. “Estos cuatro años de Trump han empoderado más a EU para ejercer presión contra México. En un segundo mandato tendría carta abierta para presionar”, dijo Miguel Ángel Sigala Gómez, profesor de la Universidad de Guadalajara (UdeG), quien expuso que las relaciones en el tema de seguridad permanecen en un contexto de desconfianza mutua y puso como ejemplo la detención del exgeneral mexicano, Salvador Cienfuegos, aprehendido la semana pasada en Los Ángeles por cargos relacionados con narcotráfico. Con respecto a un eventual triunfo de Biden, consideró posible que cobre factura a la administración mexicana por su cercanía con Trump. El académico Jorge Hernández Velázquez, experto en política exterior, resaltó que los instrumentos de cooperación se mantendrán independientemente del que llegue a la presidencia. Subrayó que hasta el momento la relación con México no se ha tocado a profundidad en las campañas presidenciales en las que los temas prioritarios han sido la economía y la atención a la pandemia. Se prevé que Trump y Biden se vean otra vez las caras hoy en un nuevo debate, tras las dudas por la cancelación del segundo frente a frente el 15 de octubre.El control de las armas que ingresan a México provenientes de Estados Unidos (EU) es uno de los puntos sin resolver en materia de seguridad bilateral, pero será inviable que autoridades estadounidenses hagan ajustes en la regulación de la venta de unidades, consideró Miguel Ángel Sigala Gómez, especialista en relaciones internacionales de la Universidad de Guadalajara (UdeG).Independientemente de quién gane la elección del 3 de noviembre en EU, entre Donald Trump (republicano) o Joe Biden (demócrata), Sigala Gómez aseveró que le toca al Gobierno mexicano mejorar los filtros para evitar la entrada ilegal de armas.Jorge Hernández Velázquez, especialista en política exterior, destacó que la poderosa Asociación Nacional del Rifle, que defiende el derecho a poseer armas en la Unión Americana, ha financiado a ambos candidatos, por lo que luce complicado que incluyan en sus prioridades endurecer la regulación a la venta de ese tipo de productos.Alejandro Híjar-Chiapa, integrante de la Asociación Mexicana de Estudios Internacionales, refirió que cualquier solución al problema de tráfico de armas requiere mayores controles de venta en territorio estadounidense para lo que, consideró, no existen condiciones, debido a las presiones de los grupos a favor del uso de las armas y de las bases del Partido Republicano.Híjar-Chiapa detalló que, en caso de que el aspirante demócrata gane la Presidencia de EU, requiere tener mayoría en el Congreso para hacer modificaciones en la regulación de la venta de armamento.Con respecto a la continuidad de los esquemas de cooperación como la Iniciativa Mérida, puntualizó que se dejó de lado por la intención de la actual administración mexicana de buscar una estrategia diferente.El Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó seguir adelante con la aplicación de la Iniciativa y planteó impulsar cooperación y otros proyectos para el desarrollo y la creación de empleos que mitiguen la pobreza.La captura en Estados Unidos (EU) del exgeneral Salvador Cienfuegos no se da en un escenario de desconocimiento por parte de las autoridades mexicanas, dijo el doctor Eduardo González Velázquez, profesor de Relaciones Internacionales del Tecnológico de Monterrey, campus Guadalajara, quien afirmó que para combatir al crimen organizado hay cooperación entre México y la Unión Americana al más alto nivel.Tras la detención del militar en Los Ángeles, California, el Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que pediría a EU las pruebas que tienen sobre el caso del general y reclamó: “No se vale que ellos participen en México y se vinculen a instituciones de México, sacan información y resuelven sin dar a conocer lo que están investigando”.González Velázquez dijo que es difícil que las autoridades mexicanas no hayan estado enteradas de los procesos de investigación que se le seguían a Cienfuegos, según EU, desde hace 10 años.“Suponer que la 4T (el Gobierno mexicano) no sabía de este proceso y que se enteran por las noticias de que el hombre más fuerte del Ejército mexicano en el sexenio pasado acaba de ser detenido en Los Ángeles, es un poco pecar de inocencia”, dijo el académico.El especialista señaló que detenciones como la del exsecretario de Seguridad de México, Genaro García Luna, y la del propio Salvador Cienfuegos son muestra de lo que podría suceder con otras personas quienes eventualmente hubiesen cometido algún delito, sin importar la posición política que tuvieron o tienen en el Gobierno.“Yo no descartaría la posibilidad de que la información que tiene EU para abrir un juicio contra estos personajes haya sido, en alguna medida, proporcionada por el Gobierno mexicano”.Plan. La Iniciativa Mérida fue firmada como un acuerdo en 2008 por los presidentes Felipe Calderón y George Bush. Contemplaba el envío de ayuda en especie contra grupos delincuenciales para asegurar el control de la frontera, pero se dejó de lado.Antinarco. En artículos publicados por el especialista en temas de seguridad, Jorge Alejandro Medellín, se destaca que la Iniciativa Mérida se planteó como un instrumento de cooperación y ayuda diseñado por el Gobierno de Estados Unidos para apoyar a México en el combate a organizaciones criminales, especialmente del narcotráfico.Ejes. La Iniciativa se estructuró sobre cuatro ejes operativos y de cooperación binacional: afectar la capacidad operativa del crimen organizado, institucionalizar la capacidad para mantener el Estado de derecho, crear la estructura fronteriza y construir comunidades fuertes y resilientes.Fuerza. Como parte de ese proyecto de seguridad, durante las administraciones de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, México recibió material bélico como helicópteros Black Hawk y Bell.407, aviones King Air y CN-235, así como sistemas de detección, entre otros tipos de tecnología.El director de la Inteligencia Nacional de Estados Unidos, John Ratcliffe, alertó que Irán y Rusia han obtenido información de votantes y que están tratando de interferir en los comicios del 3 de noviembre. Dijo que Teherán ya habría usado los datos para perjudicar a Donald Trump.