Al secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, enfrenta una delicada situación al iniciar el jueves una visita de dos días a Ucrania, tratando de fortalecer los lazos con un importante aliado que se encuentra en el centro del juicio político contra el presidente Donald Trump al tiempo que intenta no proporcionarles municiones a los demócratas que pretenden destituir al mandatario.La visita de Pompeo se produce en momentos en que el Senado se apresta a votar sobre si escucha testimonios que pudieran revelar más detalles sobre las interacciones de Trump con Ucrania.Pompeo es el funcionario estadounidense de mayor rango en visitar el país y reunirse con el presidente Volodimir Zelenskiy desde que comenzó el proceso de juicio político el año pasado con revelaciones sobre una conversación telefónica del 25 de julio entre Trump y el líder ucraniano.Trump está acusado de obstruir con Congreso y de abuso de autoridad por retener ayuda importante militar a Ucrania a cambio de una investigación de su rival político, el exvicepresidente Joe Biden, y su hijo Hunter.Ucrania ha sido un protagonista involuntario en el proceso de juicio político, y desea mantener buenas relaciones con Trump debido a la enorme dependencia del apoyo de Washington para defenderse de los separatistas pro rusos. Trump, que aún no le ha otorgado la reunión en la Casa Blanca a la que aspira Zelenskiy, ha ofrecido respaldo hasta cierto punto.JM