Un perro pequeño esperó más de tres meses a su dueño que ingresó a un hospital de Wuhan con síntomas de COVID-19, sin embargo, la persona murió cinco días después de haber ingresado al lugar.Según The New York Post, el perro, de siete años, esperó en el hospital Taikang de Wuhan, China, a su dueño todos los días en el vestíbulo desde hace tres meses. Los trabajadores del lugar se hicieron cargo de él y lo nombraron Xiobao, lo que significa pequeño tesoro.El medio señaló que el perro llegó con su dueño, quien padecía el nuevo coronavirus, en febrero pasado al hospital. Sin embargo, cinco días después de haber ingresado, el hombre murió a causa del virus.La encargada del supermercado en el edificio, Wu Cuifen, trató de correr al perro, pero no lo logró, por lo que decidió cuidar temporalmente del pequeño animal, a quien llamó Xiobao.El diario indicó cuando Wu Cuifen regresó a su trabajo, el pasado 13 abril, se percató del perrito, y los trabajadores del hospital le contaron que su dueño había fallecido por el COVID-19, pero que su mascota no se había ido del lugar. "Nunca salió del hospital, fue increíblemente conmovedor y tan leal", dijo Wu.La mujer agregó que todas las mañanas, el pequeño Xiobao la espera en la tienda y todas las noches se despide de él. "Aunque Xiobao no puede hablar, entendemos que definitivamente todavía está buscando a su dueño", dijo a medios locales."The New York Post" indicó que la Asociación para la Protección de Pequeños Animales de Wuhan se llevó al pequeño Xiobao luego de que varios pacientes se quejaron de que el animal deambulaba por el hospital. Actualmente está en búsqueda de un nuevo hogar.JM