Un poderoso tifón que atravesó el norte de Filipinas el martes provocó aludes que dejaron al menos seis muertos y obligaron a miles a huir de aldeas que aún se recuperaban de una tormenta mortífera del mes pasado, dijeron las autoridades.El jefe de policía regional Rolando Nana dijo que las autoridades intentaban verificar un informe de que un alud enterró un edificio del gobierno en construcción en Natonin, donde habrían quedado atrapadas 20 personas. Varios aludes cerraron los caminos e impidieron el acceso a la zona, añadió.El tifón "Yutu" perdió fuerza antes de tocar tierra en la provincia de Isabela antes del amanecer. Derribó árboles y postes de electricidad y arrancó techos de viviendas y negocios, dijeron las autoridades.La tormenta se debilitó aún más al atravesar la Sierra Madre y torcer al oeste por las provincias de Nueva Vizcaya, Benguet y La Unión, donde el mes pasado el tifón "Mangkhut" dejó un centenar de muertos y desaparecidos.Más de 10 mil residentes se trasladaron a zonas seguras en el norte de Filipinas antes de la llegada del tifón."Ni siquiera tuvimos que hacer evacuaciones forzadas. La gente todavía está asustada. Se marcharon de inmediato de las laderas y del río cuando la policía declaró que era el momento de evacuar", señaló Victorio Palangdan, alcalde de Itogon, una localidad de montaña con minas de oro que perdió a más de 90 vecinos, en su mayoría en deslaves provocados por Mangkhut.De La Unión, "Yutu" salió al Mar del Sur de la China, dijeron los meteorólogos."Yutu" tenía vientos sostenidos máximos de 150 kph al llegar a Filipinas, bastante menos que al pasar por el territorio estadounidense de las islas Marianas del Norte, donde cortó la electricidad, destruyó viviendas y demoró las elecciones.En la provincia de Ifugao, Baltazar Pinnay y sus tres hijas murieron en un alud en Banaue. Los rescatistas encontraron los cadáveres, dijo la policía.Otros aludes en las provincias de Kalinga y Mountain, cerca de Ifugao, mataron a un hombre de 40 años y una niña, dijo Nana.Tres hombres estaban desaparecidos. Uno de ellos trató de cruzar un río crecido y fue arrastrado por la corriente.Más de 10 mil residentes se trasladaron a zonas seguras en el norte de Filipinas antes de la llegada del tifón."Ni siquiera tuvimos que hacer evacuaciones forzadas. La gente todavía está asustada. Se marcharon de inmediato de las laderas y del río cuando la policía declaró que era el momento de evacuar", señaló Victorio Palangdan, alcalde de Itogon, una localidad de montaña con minas de oro que perdió a más de 90 vecinos, en su mayoría en deslaves provocados por "Mangkhut".GC