El primer ministro de Pakistán, Shehbaz Sharif, pidió este viernes en la ONU apoyo internacional tras las devastadoras inundaciones y exigió que se haga justicia con países como el suyo que son víctimas de la crisis climática sin haber tenido nada que ver en sus causas.En su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas, Sharif recordó que Pakistán es uno de los lugares más vulnerables del mundo a los efectos del calentamiento global cuando emite menos del uno porciento de los gases de efecto invernadero."Por eso, es totalmente razonable esperar alguna aproximación a la justicia por estas pérdidas y daños", señaló el jefe del Gobierno."¿Por qué está mi gente pagando el precio de este calentamiento global sin tener ninguna culpa? La naturaleza ha liberado su furia sobre Pakistán sin mirar a nuestra huella de carbono, que es prácticamente nula. Nuestras acciones no contribuyeron a esto", insistió.Sharif advirtió que la catástrofe que ha sufrido su país "no se va a quedar en Pakistán", pues los impactos de la crisis climática son cada vez más claros en buena parte del mundo y, si no hay medidas urgentes, terminarán por destrozar el planeta.Sobre las inundaciones, el primer ministro subrayó que son algo que "nadie ha visto nunca", una "catástrofe" que anegó un tercio del país, mató a más de mil 500 personas y que tiene a otros 33 millones en grave riesgo de salud."Durante 40 días y 40 noches una inundación bíblica cayó sobre nosotros, destruyendo siglos de récords meteorológicos y desafiando todo lo que sabíamos sobre desastres y sobre cómo gestionarlos", subrayó.Las inundaciones cubrieron un tercio de Pakistán, destrozando casas, comercios, rutas, puentes y cultivos agrícolas. Sharif dijo que su país es hoy "zona cero del cambio climático" y que la vida en Pakistán "ha cambiado para siempre".