Las autoridades del estado de Kapoeta, en el sureste de Sudán del Sur, anunciaron hoy la muerte de cinco personas en diferentes zonas de esta región, después de que el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU suspendiera la distribución de ayuda alimentaria por el deterioro de la seguridad.El gobernador de Kapoeta, Louis Lobong Lojore, dijo a Efe que las víctimas fallecieron debido a "la falta de alimentos desde la semana pasada".Lojore detalló que dos de ellas murieron en el distrito de Kaotu y las otras tres personas, en Magoth.Asimismo, el gobernador indicó que las organizaciones humanitarias que ofrecían asistencia a los civiles de la zona, en concreto el PMA, suspendieron sus actividades por el deterioro de la situación de seguridad en Kapoeta, donde algunos convoyes de ayuda fueron atacados.El responsable pidió a todos los entes internacionales que operan en Sudán del Sur que acudan en ayuda de los ciudadanos necesitados en Kapoeta.La Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo para la Infancia (Unicef) y el PMA advirtieron el pasado 26 de febrero de que dos tercios de la población de Sudán del Sur, cerca de siete millones de personas, puede sufrir una hambruna en los próximos meses si se interrumpe la ayuda humanitaria.En febrero de 2017 se declaró la hambruna en varios territorios del país, donde decenas de personas murieron por la falta de alimentos.Sudán del Sur está sumido en una guerra civil de tintes étnicos desde diciembre de 2013, que ha causado miles de muertos, millones de desplazados, además de hambrunas.