Un par de monjas malversaron fondos de una escuela católica del sur de California por unos 10 años, durante los cuales se gastaron unos 500 mil dólares, en gran parte en casinos de Las Vegas, informaron hoy aquí autoridades escolares.Las acusadas son la hermana Mary Margaret Kreuper, quien fue directora de la Escuela Católica Saint James en Redondo Beach por 28 años, y Lana Chang, quien impartió el octavo grado en el mismo plantel por unos 20 años y fue subdirectora del plantel.Tanto Kreuper como Chang se retiraron al final del año escolar 2017-2018, en junio, de la escuela K-8, que atiende a estudiantes de Torrance y Redondo Beach, informó Adrián Alarcón, portavoz de la Arquidiócesis de Los Ángeles, quien dijo que la malversación parece haber durado unos 10 años.Una auditoría de rutina tras la salida de Kreuper provocó "varias señales de alerta" de "los cheques que se cobraron en cuentas diferentes", dijo Alarcón, por una suma en el rango de 500 mil dolares.La arquidiócesis decidió no presentar cargos criminales contra las hermanas, que "confirmaron la malversación de fondos y han cooperado en la investigación", dijo monseñor Michael Meyers, sino "abordar la situación internamente a través de la investigación, la restitución y las sanciones a las hermanas"."La hermana Mary Margaret y la hermana Lana me expresaron y me pidieron que les transmitiera el profundo remordimiento que cada una siente por sus acciones y pide su perdón y oraciones", escribió Meyers en un comunicado, en que pidió no perder "la confianza o la fe en los educadores y administradores de la escuela".La orden de las Hermanas de San José de Carondelet trabaja con la Arquidiócesis de Los Ángeles para "hacer arreglos para la restitución total en beneficio de la Escuela de los fondos que se han malversado", agregó el texto."Nuestra comunidad está preocupada y entristecida por esta situación y lamenta cualquier daño a nuestra larga relación con las familias de la escuela. Las Hermanas de San José desean y tienen la intención de hacer una restitución completa a la Escuela St. James", puntualizó la carta."A pesar de esta apropiación indebida, ningún estudiante o programa en St. James ha sufrido ninguna pérdida de recursos educativos, oportunidades o innovaciones", destacó el arzobispo, quien elogió "los esfuerzos realizados por el personal de la escuela hasta la fecha y trabajaremos con ellos directamente sobre estos temas".CE