El depuesto presidente Evo Morales aseguró que está listo para regresar a Bolivia si la Asamblea Legislativa de su país no acepta la renuncia que presentó el pasado domingo.Señaló que se siente capaz de pacificar su país y de garantizar que se hagan nuevas elecciones en las que él está dispuesto a no ser candidato.Tras una entrevista con El Universal, Morales llamó a las fuerzas armadas de su país a no “mancharse las manos de sangre” y argumentó que es necesario pacificar a Bolivia, por lo que propuso que exista un proceso de diálogo en el que participen las fuerzas políticas bolivianas con intermediación de la Organización de las Naciones Unidas, la Iglesia Católica y países voluntarios.“Mi renuncia está en la Asamblea, si la Asamblea rechaza mi renuncia yo vuelvo. En este momento me siento capaz para pacificar Bolivia. La pacificación no va a llegar con balas, con armas, como lo están haciendo, la pacificación llegará a Bolivia con diálogo, un diálogo con la participación de las Naciones Unidas, de la Iglesia Católica, con países voluntarios como mediadores”, declaró.Añadió que si su “regreso a Bolivia aporta a la pacificación, vuelvo mañana mismo, me duele que haya tantos muertos, me duele que las fuerzas armadas y la Policía que he equipado tanto vayan a usar (estos equipos) contra el pueblo. Comandantes, no se manchen con la sangre del pueblo”.De acuerdo con líder boliviano, en las próximas horas en la Asamblea Legislativa Plurinacional de Bolivia se discutirá si se acepta o no su renuncia como presidente.Desde su renuncia, han muerto 10 personas, según la Fiscalía. Además, Morales y su partido mantienen intacto su poder en alcaldías, sindicatos y organizaciones indígenas que han controlado en los 13 años y nueve meses que estuvo en el poder. La autoproclamada presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, anunció que el ex presidente Evo Morales no está habilitado para participar en las nuevas elecciones que convocará su Gobierno.Áñez dijo que “toda la convulsión social” que atraviesa Bolivia es consecuencia de la insistencia de Morales de postularse a un cuarto mandato y aconsejó al Movimiento al Socialismo (MAS), el partido del ex mandatario ahora asilado en México, que busque otro candidato.“El MAS tiene todo el derecho para participar en elecciones, que busquen candidatos. Evo y (el ex vicepresidente Álvaro) García Linera no pueden participar, no están habilitados”, advirtió Áñez.Morales quedó habilitado para participar en las elecciones del 20 de octubre, calificadas de fraudulentas por la oposición, gracias a un fallo constitucional después de perder un referendo que le dijo “no” a su postulación no autorizada por la Constitución.Áñez declaró días antes que hará gestiones para anular ese fallo, que sólo puede ser revocado por el mismo tribunal que lo dictó.Y acusó a Morales de avivar las protestas desde su exilio y anticipó que presentará una queja a la administración de Andrés Manuel López Obrador.“México debe hacer respetar el protocolo de refugiado con Evo Morales”, y acotó que el ex mandatario se ha dado a la tarea de “hacer descalificaciones”.Además, el nuevo ministro de Gobierno, Arturo Murillo, acusó a Juan Ramón Quintana, brazo derecho de Morales, de estar activando las protestas en Bolivia. “Vamos a ir a la cacería de Quintana. ¿Por qué es cacería? Porque es un animal que está matando gente”, señaló.El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) señaló la necesidad de celebrar nuevas “elecciones transparentes” en Bolivia tras el asilo del ex presidente Evo Morales en México, y designó a un enviado personal que viajará al país andino.El jefe de la ONU, Antonio Guterres, “sigue profundamente preocupado” por la situación en Bolivia, dijo su portavoz Stephane Dujarric.Guterres designó al francés Jean Arnault como su enviado personal en Bolivia, “para que ofrezca el apoyo de la ONU en los esfuerzos para encontrar una solución pacífica a la crisis, incluido a través de elecciones creíbles, inclusivas y transparentes”.