Decenas de miles de "chalecos amarillos", en torno a 34 mil según las autoridades, se manifestaron por vigésimo sábado consecutivo en las ciudades de toda Francia dentro de una relativa calma tras el repunte de la violencia hace dos semanas.El Ministerio del Interior divulgó la presencia de 33 mil 700 personas en las diferentes protestas, de las cuales unas cuatro mil se concentraron en París, mientras que los "chalecos amarillos" elevaron esa cifra hasta las 102 mil 700.En cualquier caso, hubo menos manifestantes que el sábado pasado, cuando el Gobierno habló de 40 mil asistentes, y los "chalecos" de 127 mil.Hasta las 17:00 hora local, habían sido detenidas 103 personas, de las cuales 26 quedaron bajo custodia policial, según el ministro del Interior, Christophe Castaner."Pese a las serias amenazas y la voluntad de cometer actos de violencia, los dispositivos desplegados este sábado han permitido controlar inmediatamente los desbordamientos y detener a los vándalos", señaló Castaner en su cuenta de Twitter.Precisamente, el ministro del Interior ha sido una de las figuras más criticadas por su gestión de las manifestaciones, especialmente después de que, el pasado 16 de marzo, se reviviesen las escenas de gran violencia entre policía y alborotadores en pleno centro de París.Para evitarlo, Interior volvió a prohibir hoy las manifestaciones en la avenida de los Campos Elíseos y otros puntos neurálgicos de París y otras ciudades.JM