Gran parte de Europa sufría este martes las consecuencias de una intensa ola de calor, la segunda en menos de un mes, mientras Francia se preparaban a batir nuevos récords de temperatura y Portugal seguía luchando contra un incendio forestal.Este nuevo episodio canicular, excepcionalmente intenso pero más corto que el de junio, alcanzará su punto álgido el jueves, antes de un descenso paulatino a partir del viernes.En Francia, casi todas las regiones del país estaba el martes bajo vigilancia naranja por altas temperaturas y riesgos de tormentas. Aunque es poco probable que se supere el récord histórico nacional de calor, 46 °C a finales de junio, durante este episodio canicular, se prevé que caigan algunos récords locales, como en Burdeos, donde el mercurio podría rozar este martes los 42 °C (contra 40.3 ° alcanzados en 2003).París, donde niños y adultos recurrían a las numerosas fuentes de la ciudad para refrescarse, podría batir el jueves el récord histórico de calor registrado en la capital, con 41°C. El último récord data de 1947, cuando los termómetros marcaron 40.4°C.Esta nueva canícula podría agravar la sequía en Francia que está golpeando severamente al sector agrícola. La producción vinícola es una de las más afectadas, con una caída prevista de entre 6 a 13% en relación a 2018, según estimaciones oficiales.Para ayudar a los agricultores, el gobierno va a pedir el pago anticipado de mil millones de euros de las ayudas europeas.Con 40 grados en las carreteras, el calor golpeará también de lleno al pelotón del Tour de Francia este martes, tras más de dos semanas de máximo esfuerzo. Los corredores tendrán a su disposición bolsas de hielo para los que quieran disminuir la temperatura de su cuerpo, que a veces alcanza los 39 grados.Las agencias meteorológicas predicen también récords de calor en Bélgica, Luxemburgo y Holanda, con temperaturas de alrededor 40 °C.En España, una masa de aire cálido llegará el martes al País Vasco, donde se prevén temperaturas de hasta 41 ºC en la provincia de Vizcaya, que fue puesta en alerta roja, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).Portugal pidió ayuda de aviones lanzadores de agua españoles para luchar contra los incendios forestales que se reanudaron el lunes por la noche, a causa de los vientos y el calor, en una región del centro del país donde el fuego mató a más de 100 personas hace dos años.El incendio había sido "casi controlado por completo en la mañana, pero las condiciones atmosféricas no facilitaron una consolidación de la situación", indicó el Primer ministro Antonio Costa a la prensa. Más de mil 200 bomberos seguían movilizados para apagar las llamas que han dejado 39 heridos.En Alemania, donde se vive un verano particularmente caluroso, el mercurio alcanzará en los próximos días 41 °C en la región de Colonia y la región de la Sarre, fronteriza con Francia, podría batir su récord absoluto de 40.3 °C de 2015.En Reino Unido, las autoridades sanitarias aconsejaron a la gente que se mantuviera alejada del sol en las horas más calurosas del día, entre las 11H00 y las 15H00, que caminara a la sombra o que usara un sombrero, y que evitara el consumo excesivo de alcohol.The Dogs Trust, una organización benéfica para el bienestar de los animales, ha aconsejado a los propietarios que no dejen a sus mascotas solas en los vehículos, ni siquiera por unos minutos. La organización también recomendó no pasear perros en los momentos más calurosos del día y evitar el asfalto siempre que sea posible.Las olas de calor serán cada vez más intensas y frecuentes debido al calentamiento global, advierten los científicos.Hace una semana el mercurio alcanzó los 21 °C en Alert, el lugar habitado más al norte del planeta, a menos de 900 kilómetros del polo norte, un récord para esa localidad.IM