El norte de Estados Unidos recuperó el viernes temperaturas de estación después del paso de una ola de frío histórica que dejó unos veinte muertos en una semana antes de terminar su curso en la costa atlántica.La región del Medio Oeste y de los Grandes Lagos ha batido récords en los últimos días con temperaturas de -53 °C registradas en Minnesota, -51 en Wisconsin, -50 en Iowa y -48 en Illinois.El aire polar congeló parte de las famosas Cataratas del Niágara, en la frontera entre Estados Unidos y Canadá, y casi la mitad del agua de los Grandes Lagos estaba cubierta de hielo, lo que interrumpió el tráfico fluvial entre ambos países.La masa de aire que descendió del Ártico ha provocado cortes de agua y electricidad, interrupciones en el transporte y numerosos accidentes de tráfico.En los últimos días se registraron entre 17 y 21 muertes relacionadas con el frío, según un balance oficial provisional citado por los medios.En Madison, Wisconsin, un habitante incendió su vehículo bloqueado por el hielo al intentar calentar el piso con carbón ardiente, según los bomberos.El tráfico aéreo se estaba normalizando tras la anulación de miles de vuelos en todo el territorio esta semana."La mayoría de nuestros pasajeros pudieron cambiar sus pasajes", dijo a la AFP una fuente de la compañía American Airlines.Chicago, la tercera ciudad más grande del país, registró el miércoles -29 grados, a sólo tres puntos del récord de enero de 1985 (-32).Después de este frío histórico, se esperaba que regresara el calor."En algunas áreas del medio oeste, el aumento de la temperatura será el calentamiento más extremo que se haya visto en tan poco tiempo", dijo a la AFP Jeff Masters, meteorólogo de Weather Underground.JM