La policía haitiana abatió a cuatro de los miembros del comando que presuntamente asesinaron este miércoles al presidente del país, Jovenel Moise, y también detuvo a otros dos supuestos participantes en el magnicidio. Las detenciones fueron anunciadas esta madrugada por la Policía y se llevaron a cabo en un operativo cerca de la residencia de Moise, que también permitió la puesta en libertad de tres policías que habían sido secuestrados.El presidente de Haití fue asesinado este miércoles durante la incursión del citado comando en su residencia privada en Puerto Príncipe, un magnicidio que ha desestabilizado la ya frágil situación política del país caribeño. El primer ministro interino, Claude Joseph, asumió el poder tras la muerte de Moise, declaró el estado de sitio durante 15 días y garantizó que la situación del país está "bajo control", para lo que ordenó desplegar a la Policía y a las Fuerzas Armadas, que lograron interceptar a varios de los asaltantes.El asesinato se produjo a poco más de dos meses de la fecha prevista de las elecciones presidenciales y legislativas, el 26 de septiembre, en momentos en los que el Parlamento lleva año y medio clausurado y la cúpula del Poder Judicial tampoco está plenamente operativa.UNA CRISIS CRECIENTELa gran mayoría de la oposición respondió a ese llamamiento con una condena vehemente del asesinato, incluyendo sectores de la izquierda que han alimentado las persistentes protestas que hicieron tambalearse al Gobierno de Moise en varias ocasiones en los últimos tres años. Entre ellos se encontraba también el Sector Democrático y Popular, plataforma de izquierdas que llegó a nombrar a un presidente interino el pasado 7 de febrero, día en el que consideran que terminó el mandato de Moise y a partir del cual, a su entender, pasó a usurpar el poder.La presente crisis haitiana se desató a mediados de 2018 por denuncias de corrupción contra Moise, un productor de banano que alcanzó la Presidencia aupado por la popularidad de su predecesor, el expresidente y cantante Michel Martelly. Desde entonces, no ha hecho más que agravarse, con episodios virulentos como la denuncia que hizo Moise el pasado 7 de febrero, afirmando que la oposición tramaba un plan para asesinarle, similar al que se llevó a cabo este 7 de julio.Los planes de Moise de aprobar una nueva Constitución, a través de un referéndum aplazado dos veces y ahora convocado para el mismo día de las elecciones, el 26 de septiembre, siguió tensando la situación en los últimos meses.