La Amazonia brasileña, la más extensa selva tropical del planeta, perdió 877 kilómetros cuadrados de selva en octubre, 5% más que en 2020 y un nuevo récord para el mes, según datos divulgados ayer por el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE).De acuerdo con la información registrada mensualmente por el Sistema de Detección de Deforestación de la Amazonía Legal en Tiempo Real (Deter), se trata de la mayor área devastada para el mes desde 2016, momento en que comenzó a hacerse la medición.El récord anterior para octubre fue en 2020, con 836 kilómetros cuadrados de selva destruidos. Los datos oficiales también señalan que la deforestación de la amazonia brasileña en el mes fue menor que la registrada en septiembre, cuando se devastaron más de 984 kilómetros cuadrados de vegetación nativa en la zona.La metodología utilizada en el Deter se basa en imágenes satelitales y es utilizada por el INPE para ofrecer alertas anticipadas sobre las áreas que están siendo deforestadas en la Amazonia.En total, fueron cuatro mil 519 advertencias de deforestación enviadas por el sistema en octubre. La deforestación de la selva acumula cerca de ocho mil kilómetros cuadrados en los diez primeros meses del año y se acerca a la de 2020, cuando se talaron 10 mil 900 kilómetros cuadrados de vegetación nativa, la tasa más alta en 12 años.Las cifras divulgadas ayer contradicen el discurso de Brasil en la COP26, donde el Gobierno de Jair Bolsonaro ha afirmado que las tasas de deforestación han venido cayendo por la intensificación de acciones de control y vigilancia para frenar la devastación de la selva. El ministro de Medio Ambiente, Joaquim Leite, aseguró en Glasgow que Brasil eliminará “la deforestación ilegal” para 2028 y que reducirá en 50% la emisión de gases de efecto invernadero hasta 2030.