El Ministerio neerlandés de Salud levantará a partir del próximo año las restricciones que se aplican a la hora de donar sangre a los hombres que hayan tenido relaciones sexuales con otros hombres.La preferencia u orientación sexual dejará de representar una restricción a la hora de donar sangre, según anunciaron el ministro neerlandés de Salud, Ernst Kuipers, y el banco de sangre Sanquin.La política actual de selección de donantes especifica que los hombres que hayan tenido contacto sexual anal con una nueva pareja o parejas alternativas en los últimos meses no pueden donar sangre por el potencial riesgo que existen para los receptores.La idea del ministro es que a partir del 1 de enero se deje de hacer una distinción entre personas homosexuales y heterosexuales en la política de donación, después de que se hayan hecho investigaciones y estudios que han demostrado que el riesgo de transmisión de enfermedades por la sangre no aumenta con la inclusión de hombres homosexuales con una vida sexual activa. El planteamiento del gobierno es formular preguntas nuevas dirigidas a todos los donantes, independientemente de sus preferencias u orientación sexual, sobre si su vida sexual puede conllevar un riesgo de infecciones transmitidas por la sangre.La responsabilidad seguirá cayendo en el donante, puesto que es quien debe completar de buena fe un formulario en el que aparecen las preguntas sobre su vida sexual y su salud, aunque Sanquin asegura que también analiza toda la sangre donada y si da positivo en alguna enfermedad, no se envía a los hospitales. AH