El líder opositor y jefe de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, abrió un nuevo frente contra el presidente Nicolás Maduro, al lograr el respaldo de algunas de las principales centrales sindicales de empleados públicos.“La presión apenas empieza”, afirmó Guaidó al anunciar, tras una reunión con los dirigentes de cinco centrales que agrupan a más de 600 sindicatos, que los empleados públicos se sumarán a las acciones de presión contra el Gobierno realizando paros escalonados. Aunque dentro del sector público, integrado por unos tres millones de trabajadores, existe descontento por la compleja situación económica y social que enfrenta Venezuela, hasta la fecha no se habían pronunciado sobre la crisis.“Me opongo al maltrato de los trabajadores. Me opongo a morir de hambre”, dijo José Martínez, secretario general del sindicato de la Cancillería, al llamar a sus compañeros del sector público al unirse al antichavismo.Por su parte, Maduro le restó importancia a las acciones de la oposición, y llamó a sus seguidores y a las Fuerzas Armadas a no caer en “provocaciones”. El mandatario pidió realizar “marchas antiimperialistas” el próximo sábado en todo el país.