Un palestino de 13 años abrió fuego el sábado en el este de Jerusalén e hirió a dos personas, informaron autoridades israelíes, un día después de que otro agresor mató a siete personas afuera de una sinagoga en el atentado más letal registrado en la ciudad desde 2008.El primer ministro Benjamin Netanyahu convocó a su gabinete de seguridad el sábado por la noche para discutir el estallido de violencia, que se dio tras una mortal incursión militar israelí en Cisjordania, una andanada de misiles desde la Franja de Gaza y una serie de ataques aéreos israelíes en el territorio bloqueado. Se espera que anuncie una serie de medidas punitivas contra los palestinos por la noche.Prometió acelerar los procedimientos para sellar y destruir las casas de los atacantes, facilitar que los civiles israelíes obtengan permisos de posesión de armas y castigar a las familias de los atacantes palestinos quitándoles la seguridad social y las prestaciones de salud."No buscamos una escalada, pero estamos preparados para cualquier escenario", señaló.El ataque ocurrido en el vecindario palestino de Silwan, en el este de Jerusalén, cerca de la histórica Ciudad Vieja, hirió a un padre y su hijo, de 47 y 23 años, según los paramédicos. Ambos estaban conscientes y fueron hospitalizados en estado de leve a grave, agregaron.Mientras la policía se dirigía al lugar, dos testigos dispararon sus armas reglamentarias y sometieron al adolescente, dijo la policía, que le confiscó el pistola y lo trasladó al hospital debido a sus heridas.Un video mostró a los agentes escoltando al menor, vestido únicamente con ropa interior, lejos del lugar y sobre una camilla, con las manos esposadas por la espalda. Las autoridades acordonaron el lugar del ataque y los vehículos de urgencias y agentes de las fuerzas de seguridad rodeaban el sitio mientras los helicópteros sobrevolaban la zona."Esperó para emboscar a civiles en el día sagrado del Sabbat", dijo el vocero de la policía israelí, Dean Elsdunne, que añadió que el adolescente le disparó a un grupo de cinco civiles. Las imágenes de seguridad mostraron que las víctimas eran judíos practicantes, con kipas y tzitzits, o borlas rituales anudadas.CR