El gobierno y dirigentes políticos de Iraq celebraron este viernes el otorgamiento a la activista iraquí yazidí Nadia Murad del premio Nobel de la Paz, un galardón que ha recibido junto al médico congoleño Denis Mukwege.El recién nombrado presidente de Iraq, Barham Saleh, felicitó en una llamada telefónica a Murad, según un comunicado de su oficina."He hablado con la querida Nadia Murad y la he facilitado por ganar el premio Nobel de la Paz", dijo Saleh, de acuerdo con el comunicado.El presidente destacó que el reconocimiento a Nadia Murad es un homenaje a todos los iraquíes por su lucha y su firmeza contra el terrorismo y el extremismo."Encarna el reconocimiento del mundo a la tragedia de los yazidíes y a las víctimas del terrorismo en Iraq, así como de su valentía y su perseverancia en defender los derechos usurpados", agregó Saleh.El ex primer ministro Haidar Al Abadi también expresó en un comunicado su felicitación a Murad por ganar el Nobel.Por su parte, el secretario general del Partido Nacional del Kurdistán (PUK), Kosrat Rasul Ali, destacó que la joven es un "símbolo de firmeza para las mujeres y jóvenes kurdas"."Nuestra querida Nadia, hemos recibido la noticia del premio Nobel de la Paz 2018 con mucha felicidad y alegría. Es un placer para nosotros y para todo el pueblo del Kurdistán que una mujer eficiente e inquebrantable como usted sea honrada con este premio", señaló en un mensaje enviado a la activista.Subrayó que Murad es "la primera kurda ganadora del premio Nobel de la Paz" y "un ejemplo de firmeza ante la ideología del extremismo para todos los hijos del Kurdistán".Murad fue reconocida hoy por el Comité Nobel Noruego por su lucha por acabar con el uso de la violencia sexual "como arma de guerra y en conflictos armados".La activista, de 25 años, es la voz más reconocida internacionalmente de los yazidíes, una minoría religiosa de etnia kurda asentada en el norte de Iraq, cuyas raíces se remontan a dos mil años, en los que ha sufrido el genocidio reiteradamente.El relato del genocidio perpetrado desde 2014 por el grupo yihadista Estado Islámico contra ellos, que ha causado alrededor de cinco mil muertos y supuesto la esclavitud de unas tres mil niñas sometidas a la venta para su explotación sexual, ha sido la bandera de la activista, galardonada hace dos años con el Premio Sajarov del Parlamento Europeo.OF