El expresidente brasileño Michel Temer fue puesto en libertad tras pasar cuatro noches en prisión preventiva bajo la sospecha de ser el “líder” de una organización criminal que incurrió en delitos de corrupción durante los últimos 40 años.Temer, de 78 años, se vio favorecido por la inesperada decisión unilateral del juez de segunda instancia, Antonio Ivan Athié, quien alegó que la prisión preventiva decretada el pasado jueves contra el exmandatario se basó en “suposiciones de hechos antiguos, apoyadas en afirmaciones” de la Fiscalía.El magistrado, del Tribunal Regional Federal de la Segunda Región, con sede en Río de Janeiro, se pronunció antes de que esa misma corte lo hiciera de forma colegiada en una sesión marcada para mañana, en la que iba a analizar un “habeas corpus” interpuesto por la defensa del ex jefe de Estado.“Aunque se admita que existen indicios que pueden incriminar a los implicados, estos no sirven para justificar la prisión preventiva” porque son “antiguos” y además “no está demostrado” que los sospechosos “atenten contra el orden público”, “oculten pruebas”, u “obstaculicen” las investigaciones, aseguró el juez. La Fiscalía anunció que recurrirá la puesta en libertad.Temer afronta 10 investigaciones relacionadas con diferentes asuntos de corrupción y permanecía recluido desde la tarde del pasado jueves en una sala “especial” de la Superintendencia Regional de la Policía Federal de Río de Janeiro, en la zona portuaria de la capital fluminense.