Cristina Fernández, expresidenta y actual senadora argentina, denunció “destrozos” y presuntos robos en los allanamientos que se produjeron el pasado agosto en su residencia de El Calafate (Santa Cruz) en una causa por sobornos.La ex mandataria denunció los hechos a través de un video, donde mostró algunas de las partes con desperfectos y reiteró que su residencia fue “literalmente tomada” hace tres semanas en los allanamientos que se llevaron a cabo por orden del juez federal Claudio Bonadio, que la acusa de recibir millonarios sobornos. Los registros en El Calafate, que se sumaron a los que el juez mandó realizar en su domicilio del barrio de Recoleta, en Buenos Aires, y en su otra casa de Río Gallegos, duraron tres días y Fernández ya culpó a Bonadio de ser el artífice de un entramado de “persecución” e “humillación” hacia ella.Además, aseveró que muchos de sus bienes personales fueron extraídos sin tener nada que ver con la investigación. “Todas mis peores predicciones, desgraciadamente, se cumplieron”, dijo. Según su declaración, se llevaron las bandas y bastones presidenciales de su fallecido esposo, el también expresidente Néstor Kirchner, y las suyas.La investigación de Bonadio ha dejado multitud de empresarios y exfuncionarios imputados, de los que más de una quincena ha declarado ya como “arrepentidos”, figura que otorga a los acusados beneficios penales si colaboran con la justicia.