Estados Unidos recuperó cerca de 110 mil kilómetros cuadrados del territorio que la organización extremista Estado Islámico (EI) tenía en países como Siria e Irak, informó el Departamento de Estado en su reporte anual sobre terrorismo en el mundo.De acuerdo con la dependencia, las acciones antiterroristas realizadas por Estados Unidos durante 2018 permitieron liberar a 7.7 millones de hombres, mujeres y niños que se encontraban en zonas dominadas por el grupo yihadista. Estos éxitos prepararon el escenario para la destrucción final del llamado "califato" en 2019, explica el reporte.Estados Unidos y sus socios, agrega el documento, continuaron persiguiendo a la red terrorista Al-Qaeda a nivel mundial, además de que aplicaron la máxima presión sobre el terrorismo respaldado por Irán, ampliando las sanciones contra los actores y representantes estatales iraníes y construyendo una voluntad política internacional más fuerte para contrarrestar esas amenazas.El panorama fue complejo durante 2018, ya que a pesar de que el EI perdió buena parte de su territorio, la organización demostró su capacidad de adaptación y dirigió sus esfuerzos para inspirar o dirigir seguidores a través de internet.En el último año, la presencia mundial del EI evolucionó con afiliados y redes que realizan ataques en el Medio Oriente, el sur y el este de Asia y África, además de que integrantes de la organización terrorista viajaron desde la zona de guerra a terceros países, lo que representó nuevos peligros.El reporte detalla que cientos de miembros del EI que fueron detenidos han sido repatriados y enjuiciados. Incluso admitió que Washington ha presionado a otras naciones para tomar las mismas medidas en sus territorios.En este sentido, el coordinador de contraterrorismo del Departamento de Estado, Nathan A. Sale, destacó la capacidad de los denominados terroristas locales que, inspirados por la ideología del EI, ejecutan sus planes contra objetivos "blandos" como restaurantes, hoteles u otros espacios públicos.Aseveró que Irán es la principal nación que se encarga de patrocinar el terrorismo a nivel global, pues ha gastado cerca de mil millones de dólares por año con ese objetivo.De acuerdo con el Departamento de Estado, otro de los puntos importantes del informe es que debido a los reveses sufridos por el EI, Al-Qaeda parece apuntalarse como la vanguardia del movimiento yihadista global, pese a los esfuerzos que ha implementado Washington desde el 11 de septiembre de 2001.El reporte sostiene que la comunidad antiterrorista internacional enfrentó un gran desafío por la evolución de la tecnología, como los servicios de comunicación encriptada o el uso de drones de venta comercial.Durante 2018, el Departamento de Estado completó 51 acciones de designación contra grupos y personas terroristas, mientras que el Departamento del Tesoro completó 157 designaciones de terrorismo; acciones que permitieron cortar el flujo de recursos a las organizaciones extremistas.OB
