El uso obligatorio del cubrebocas, el distanciamiento social y hasta la habilitación de lugares de votación desde el automóvil han sido algunas de las medidas adoptadas en de miles de puntos de votación en Estados Unidos (EU) para disminuir la probabilidad de contagio de COVID-19.En Texas, la posibilidad de votar desde el coche, como si fuera un restaurante de autoservicio, fue habilitada para facilitar la participación de personas en riesgo debido a la pandemia.Pese a que la afluencia a ese centro fue baja, una de las participantes comentó que ese tipo de votación “ha llegado para quedarse”. En EU el servicio en formato “drive-through”, es habitual en todo el territorio.Además, en Wilmington, Delaware, los ciudadanos tenían que estar a separados por dos metros de distancia si querían ejercer su derecho al voto. Los electores debían ingresar al sitio de votación en grupos de cuatro a través de unas cabinas que tenían pantallas táctiles, que se limpiaban después de que alguien las tocaba, gracias a que los voluntarios pasaban un líquido higienizante y toallitas húmedas.Ese constante trajín de limpieza hizo que el tiempo de votación de cada ciudadano se prolongase, algo que no parecía importar a aquellos que esperaban, en silencio, su turno.