John Walker Lindh, apodado el "talibán estadounidense" tras ser capturado mientras luchaba con los insurgentes islamistas en noviembre de 2011, saldrá de prisión el jueves en medio de preocupaciones que sugieren que no ha abandonado la ideología que lo llevó a Afganistán.Conocido como "Detenido 001" durante la guerra contra el terrorismo emprendida por Washington, la liberación de Lindh tras 17 años en prisión resucita los recuerdos de los ataques del 11 de septiembre en Nueva York y destaca el hecho de que, casi dos décadas después, Estados Unidos continúa batallando a los talibanes sin que se vislumbre un final. Mientras su familia y cercanos aseguran que jamás utilizó las armas contra su propio país, otros dicen que sigue siendo un yihadista comprometido y un peligro para la sociedad.En una carta dirigida a la Agencia Federal de Prisiones, dos senadores citaron esta semana acusaciones no comprobadas de que Lindh apoya la violencia extremista "abiertamente" y se preguntaron cómo se logrará contener esa supuesta amenaza."Debemos considerar las implicaciones de seguridad y protección para nuestros ciudadanos y las comunidades que recibirán a individuos como John Walker Lindh", dijeron.OB