Una sociedad catalana profundamente dividida decidirá hoy si renueva o no su confianza en los independentistas, en unas elecciones regionales excepcionales convocadas tras la destitución del ejecutivo secesionista, cuyo presidente destituido, Carles Puigdemont está en Bélgica, y parte de su Gobierno en la cárcel.Los sondeos dan favoritos a dos partidos: los independentistas de ERC (Izquierda Republicana de Cataluña), cuyo líder, Oriol Junqueras, está en prisión preventiva como sospechoso de sedición y rebelión, y Ciudadanos, un partido favorable a la unidad de España y primera fuerza opositora en la cámara saliente.Simultáneamente, los mismos sondeos pronostican que ninguno de los dos podrá gobernar en solitario, abriendo la puerta a la repetición de un ejecutivo independentista, uno unionista u otro transversal, cuya composición será determinante para el futuro político. Sin embargo, la amenaza pesa sobre estas elecciones, en las que el jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, espera que los ánimos independentistas sean olvidados.Incluso ayer dijo que los dirigentes regionales en España “ya saben lo que pasa” si incumplen la ley, en referencia a la intervención de la autonomía de Cataluña. Cinco millones y medio de catalanes están llamados a votar en estos comicios convocados por el Gobierno de Mariano Rajoy después de aplicar el Artículo 155, que le permitió destituir al ejecutivo catalán y disolver el parlamento después de que éste proclamó la independencia.