El campanario de la icónica catedral parisina Notre Dame, en Francia, repicó ayer, un año después de que sufriera grandes daños por un incendio que consumió parte del techo, pero que no alcanzó los vitrales principales ni las campanas.El repique de la campana mayor se hizo manualmente por una persona completamente cubierta por un traje blanco, lentes de seguridad, casco y un cubrebocas.La pieza de 13 toneladas en la torre del lado Sur, llamada “Emmanuelle”, sonó para recordar el aniversario del suceso y como un aplauso para los miembros del equipo de salud que en el país combaten el avance del coronavirus.La reconstrucción de la estructura debió detenerse precisamente a causa de la expansión de la pandemia, pues la vida de los trabajadores debía de ser protegida. Aun así, el presidente Emmanuel Macron sostuvo en un mensaje de video a sus ciudadanos: “Reconstruiremos Notre Dame en cinco años, como prometí, y haremos todo lo posible para mantener este plazo”.Notre Dame “es un símbolo de nuestra resiliencia, de nuestra capacidad para superar retos y pararnos correctamente”, dijo Macron.Pero el progreso se ha visto afectado por contratiempos, desde el descubrimiento de polvo tóxico del techo de plomo derretido hasta los peligros a la salud y la inseguridad provocada por la pandemia.Unas 40 mil barras metálicas “erigidas para un proyecto de renovación previo” se derritieron en el intenso incendio del 15 de abril de 2019. Ahora, unos inestables andamios ponen en peligro a la joya gótica que para muchos representa el alma de Francia.La restauración está lejos de haberse iniciado y la iglesia sigue en estado de “urgencia absoluta”, dijo el general Jean-Louis Georgelin, encargado de la restauración.Grandes y pequeñas donaciones están ayudando a pagar la restauración, con 188 millones de euros recibidos, dijo Georgelin al diario Le Parisien.Alemania ofreció ayudar a reconstruir partes de Notre Dame, un año después que un incendio causó graves daños en la célebre catedral parisina.Las autoridades sugirieron que artesanos alemanes rehicieran algunos de los grandes ventanales situados muy por encima de la vista y diseñados para permitir la entrada de aire y luz en la catedral.El Gobierno germano comunicó que tres vidrieros que trabajan en la restauración de las catedrales alemanas podían ofrecer su “gran experiencia” a sus colegas franceses.La ministra alemana de cultura, Monika Gruetters, dijo que su país afrontaría los costos.AP