Los líderes de las siete naciones más industrializadas (G7) esperan consensuar un plan para acelerar la respuesta a futuras pandemias y reducir a menos de 100 días los plazos para desarrollar tratamientos, test diagnósticos y vacunas cuando se detecta una nueva enfermedad.Los mandatarios del G7, reunidos hasta mañana en Cornualles, Inglaterra, reflejarán esa estrategia en un documento bautizado como “Declaración de Carbis Bay”, en referencia a la localidad costera que acoge las charlas, según avanzó el Gobierno británico, anfitrión del evento.La estadounidense Melinda French Gates, cofundadora de la Fundación Bill y Melinda Gates, junto con el consejero científico del Gobierno británico, Patrick Vallance, presentarán esa estrategia sanitaria hoy ante los líderes políticos.“En el último año, el mundo ha desarrollado diversas vacunas efectivas contra el coronavirus, se han aprobado y manufacturado rápidamente y están ya llegando a los brazos de la gente que las necesita”, afirmó el primer ministro británico, Boris Johnson.“Pero para derrotar verdaderamente al coronavirus y recuperarnos, debemos prevenir que pandemias como esta ocurran nunca más. Eso significa aprender las lecciones de los últimos meses y hacer las cosas de manera distinta la próxima vez”, agregó.El Ejecutivo británico subraya que el G7 está “especialmente bien posicionado” para erigirse como coordinador de los esfuerzos globales para prevenir futuras pandemias, dado que sus miembros acogen a “dos tercios del mercado farmacéutico mundial”.Al debate sobre salud global que celebrarán los mandatarios del G7 se sumarán los cuatro países invitados a la reunión por el Reino Unido: India, Australia, Suráfrica y Corea del Sur, así como el secretario general de la ONU, António Guterres.EFELa organización Amnistía Internacional (AI) alertó que el compromiso de donar mil millones de dosis de la vacuna contra el COVID-19, que se espera que salga de la cumbre del G7, es solo “una gota en el océano” ante las necesidades globales.La secretaria general de AI, Agnès Callamard, juzgó que mil millones de dosis “ni siquiera se acercarían a cubrir la población total de la India, por no hablar de toda la población mundial”.Callamard agregó que “tampoco aborda los problemas de raíz. No solo no es ambicioso, sino que huele a interés propio, especialmente si se consideran los datos que apuntan a que los países del G7 tendrán un excedente de tres mil millones de dosis para final de año””.Los expertos estiman en torno a 11 mil millones de dosis la cantidad necesaria para hacer frente a la pandemia a nivel global.