Shoko Asahara, líder de una secta apocalíptica, fue ejecutado junto con varios de sus seguidores por su participación en el ataque con gas sarín en el metro de Tokio en 1995 y otros crímenes, reportó el viernes la prensa japonesa.El secretario general del gabinete Yoshihide Suga confirmó la ejecución de Asahara, pero declinó comentar sobre las otras. Suga solo dijo que el Ministerio de Justicia realizaría un anuncio más tarde el viernes.La cadena pública japonesa NHK informó que seis seguidores de Asahara también fueron colgados, mencionando fuentes no reveladas. En total, 12 seguidores habían estado en el corredor de la muerte con Asahara por los crímenes, los cuales provocaron la muerte de 27 personas. Asahara tenía 63 años.El ataque en el metro fue el más osado. Los miembros de su secta, denominada Aum Shinrikyo, perforaron bolsas de plástico para liberar el gas sarín dentro de los vagones, lo que provocó la muerte de 13 personas y causó afecciones a más de seis mil.Fundada en 1984, la secta atrajo a muchos jóvenes, incluso a graduados de universidades de prestigio, de entre los cuales Asahara eligió a sus aliados más cercanos.La secta acumuló armas químicas, biológicas y convencionales para llevar a cabo los crímenes ordenados por Asahara, previo a un enfrentamiento apocalíptico con el gobierno.La secta afirmó que tenía 10 mil miembros en Japón, además de otros 30 mil en Rusia. Se ha disuelto, aunque cerca de dos mil personas continúan con sus rituales en tres grupos disidentes, los cuales son vigilados por las autoridades.Suga dijo que las autoridades están tomando medidas de precaución en caso de haya alguna represalia por parte de sus seguidores.SA