Estados Unidos dijo el martes que volverá a retener sus contribuciones al Fondo de Población de Naciones Unidas por su trabajo con China, mientras la agencia acusó a Washington de poner en peligro la salud de las mujeres en todo el mundo.Esta declaración marcó el tercer año consecutivo que Estados Unidos rechaza financiar esta agencia de la ONU, mientras el gobierno del presidente Donald Trump busca combatir el aborto, un tema fundamental para su base cristiana evangélica.El secretario de Estado, Mike Pompeo, determinó que "las políticas de planificación familiar de China siguen involucrando el uso de abortos coercitivos y prácticas de esterilización", condiciones que, bajo la ley de Estados Unidos, ordenan concluir el financiamiento, dijo la vocera del Departamento de Estado.La funcionaria dijo que documentos públicos del fondo de Población de la ONU afirman que "colabora en la planificación familiar con la agencia responsable del gobierno chino de estas políticas coercitivas".La agencia, conocida por las siglas UNFPA, refutó esta consideración diciendo que se opone a políticas coercitivas y que Estados Unidos nunca visitó su oficina en China para comprobarlo por sí mismo."Esta desafortunada decisión impedirá el trabajo crucial de la UNFPA de proteger la salud y la vida de cientos de millones de mujeres y niñas alrededor del mundo, incluidos entornos humanitarios", dijo en un comunicado en el que pidió a Estados Unidos reconsiderar.China, que busca controlar la creciente población, en 1979 impuso una política de un hijo a la mayoría de los ciudadanos, lo que condujo a abortos forzados y esterilizaciones.En 2016 el gobierno comunista aumentó el límite a dos hijos y hay señales de que la política podría terminar por completo, con un borrador de código civil que será introducido en 2020 que no menciona la "planificación familiar".En 2016, cuando Barack Obama era presidente, Estados Unidos otorgó más de 63 millones de dólares a la UNFPA, convirtiéndose en el tercer donador después de Reino Unido y Suecia.OB