La ex presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, aseguró este martes que nunca encontrarán nada para involucrarla en la causa llamada "ruta del dinero", ya que jamás se apoderó de dinero ilícito alguno.La declaración de Fernández fue entregada este martes por escrito ante el juez federal Sebastián Casanello en una audiencia en los tribunales de Comodoro Py, a la que fue citada a declarar en relación a esa causa, cuyo principal imputado es el empresario Lázaro Báez, quien se encuentra encarcelado.Fernández, también senadora, insistió en que los señalamientos de lavado de dinero en su contra son "una persecución política", pues además intentó negar vínculos con el dueño de la compañía Austral Construcciones, pero éste fue amigo muy cercano al fallecido ex presidente Nestor Kirchner, su esposo.La llamada "ruta del dinero" es una causa por la cual Báez lleva más de dos años de prisión, acusado de presunto blanqueo de 60 millones de dólares entre 2010 y 2013, y Cristina Fernández es señalada de ser coautora de ese lavado de dinero, aunque la ex presidenta niega estar involucrada en ese delito.La orden de presentación fue emitida por el tribunal el pasado 31 de agosto, cuando el juez Casanello estimó que la ex presidenta argentina no podía quedar excluida de la "ruta del dinero" por sus lazos comerciales con Báez y por el delito precedente que originó esos fondos que finalizaron en operaciones de blanqueo.En su escrito presentado al juez, la ex jefa de gobierno declaró que las autoridades judiciales podrían vigilar sus movimientos, escuchar sus conversaciones telefónicas o "excavar toda la Patagonia o donde se les ocurra, que nunca van a encontrar nada con qué involucrarme".La senadora abandonó los tribunales poco más de una hora después tras defender su inocencia en la causa la "ruta del dinero", una de las siete que se siguen en su contra. El lunes, el juez Claudio Bonadio la procesó como jefa de una asociación ilícita que se dedicó al cobro de coimas.De acuerdo con el periódico El Clarín, los lazos comerciales entre Fernández y Báez y las operaciones que los unieron por años -entre ellas negocios hoteleros y el direccionamiento de obra pública a favor del Grupo Austral-, condujeron a la ex presidenta a una nueva instancia de indagatoria en la justicia federal.Esta causa, que cuenta con 25 imputados, entre ellos Báez y sus cuatro hijos, se encuentra en instancia de juicio oral, el cual comenzará el próximo 30 de octubre, por ahora, sin la presencia de Fernández como procesada, aunque de ser confirmada la acusación podría ser incluida en el juicio.SC