El gobernador de California, Gavin Newsom, anunció este jueves que las aglomeraciones y las actividades no esenciales estarán prohibidas en todas las zonas del estado en las que la pandemia del nuevo coronavirus pueda llegar a desbordar los servicios hospitalarios.Estas restricciones entrarán en vigor en las áreas donde las unidades de cuidados intensivos estén ocupadas en más del 85% de su capacidad, lo que podría ocurrir en apenas "un día o dos" en algunas zonas del estado más poblado del país, explicó Newsom.En base a este "confinamiento regional", se prohibirán todas las aglomeraciones que impliquen la presencia de miembros de diferentes hogares, así como los desplazamientos y servicios "no esenciales". Los bares permanecerán cerrados y los restaurantes sólo podrán ofrecer comidas para llevar, mientras que los pequeños comercios verán limitada su capacidad al 20 por ciento.Las escuelas podrán seguir abiertas, igual que las "infraestructuras críticas".California había decretado ya un toque de queda que limitaba los desplazamientos entre las 22:00 y las 05:00 horas en los condados más afectados por el coronavirus, pero no fue suficiente para invertir la tendencia. Desde el comienzo de la epidemia, se registraron más de 1.26 millones de casos y 19 mil 400 muertes en el estado."Si no actuamos ahora, nuestro sistema hospitalario se verá sumergido", insistió Newsom, subrayando las cifras alarmantes de contagios.JM