Un incendio ardía sin control el lunes en un bosque en las afueras de Los Angeles, tras un fin de semana en el que se rompieron récords de temperaturas, mientras los meteorólogos advierten sobre el peligro de incendios en el seco oeste de Estados Unidos.Al menos 400 hectáreas fueron devastadas por el incendio que comenzó en el bosque nacional de Los Angeles el sábado por la mañana.Miles de habitantes fueron evacuados de sus casas en la comunidad de Wrightwood, con apenas 5% del fuego contenido.Los bomberos dijeron que el fuego está arrasando una zona con espesa vegetación."El terreno está muy empinado, es un área" complicada, dijo al diario Los Angeles Times Alison Hesterly, de Cal Fire San Bernardino.Unos 200 bomberos combaten el incendio, incluso desde el aire."Se están (...) enfocado principalmente en los bordes del lado noroeste y del extremo sur (...), a la espera de que el viento no empuje al fuego por fuera de las líneas de contención", precisó Hesterly.El fuego inició en medio de las olas de calor extremo que azotan a partes de California y del oeste de Estados Unidos, con temperaturas que alcanzaron los 45.5 grados Celsius en Palm Spring el sábado, las más altas desde que se tiene registro.En Nuevo México, cientos de miles hectáreas de bosque han sido consumidas por incendios que llevan meses ardiendo.JM