El pasado 12 de noviembre los ciudadanos de la metrópoli china de Guangzhou recibieron la orden de las autoridades de quedarse en sus casas luego de que los casos de COVID repuntaran en las últimas semanas.De acuerdo con la Comisión Nacional de Salud (CNS), tan sólo el 11 de noviembre los contagios por el virus ascendieron a 11 mil 773, de los cuales 10 mil 351 eran asintomáticos, situación que también fue determinante para que varias escuelas fueran cerradas temporalmente mientras se controlaba el nuevo repunte.Cabe señalar que en el caso de Guangzhou, la cual cuenta con un total de 13 millones de habitantes, se detectaron 3 mil 775 contagios por COVID de los 11 mil 773 casos mencionados, por lo que han limitado a las familias a salir tan sólo una familia por hogar para conseguir comida y víveres, en general.A esta medida se aúna que los delegados por cada hogar pueden acceder a los supermercados solamente sí presentan un resultado negativo contra el virus, el cual se les realiza todos los días.A las medidas de confinamiento también se sumaron las ciudades de Chongqing y Zhengzhou, situación que ha derivado en frustración por parte de la población debido a la falta de acceso a alimentos y medicamentos.Luego de que China informara el pasado miércoles el mayor número de casos diarios de COVID desde que comenzó la pandemia hace casi tres años, las autoridades de Zhengzhou, conocida por ser la sede de la fábrica más grande de IPhone en el mundo, pusieron en confinamiento a varios distritos, lo cual ha derivado en varias protestas por la falta de acceso a víveres básicos y a atención médica.A estas protestas en el interior del país también se sumaron manifestaciones en París, Londres y Tokio, en donde comunidades chinas exteriorizaron su molestia en contra del presidente Xi Jinping y su política "COVID cero", la cual se vio ejecutada en la instalación de puertas que bloqueaban el acceso a complejos habitacionales en donde se han detectado casos de COVID y la semana pasada en Xinjiang impidieron que diez personas salieran de su edificio en medio de un incendio, teniendo como consecuencia un fatídico final.Este trágico episodio fue el parte aguas en el descontento social, y despertó la ira contra las medidas de Jinping, a quien exigen renunciar al cargo.No obstante, estas medidas han sido justificadas sobre la necesidad de frenar el brote de COVID en la región, pues, de acuerdo con cifras oficiales compartidas el 23 de noviembre, el total de casos locales fueron 31 mil 444 en toda China, cifra que supera el récord anterior de 29 mil 317 contagios, reportados el 13 de abril.Ante este panorama, el gobierno encabezado por Jinping ha señalado que relajara las medidas para controlar el repunte de contagios, pero no las cambiará, y menos ahora que la nueva actualización de número de casos al corte del 27 de noviembre ascendió a 40 mil 357 casos. MS