El decreto que daba inmunidad penal a militares y policías en Bolivia quedó derogado luego que el Gobierno interino considerara que ese país logró “la ansiada pacificación”.La presidenta provisional, Jeanine Áñez, anunció la derogación del decreto que fue cuestionado por organismos internacionales de derechos humanos, ya que en Bolivia la violencia, desde los comicios fallidos del 20 de octubre, ha ocasionado 34 muertos por disparos durante operativos militares y policiales.“Hemos logrado la ansiada pacificación”, sostuvo Áñez en una breve comparecencia en el Palacio de Gobierno. La mandataria interina argumentó que el decreto que emitió el pasado 14 de noviembre, dos días después de asumir el poder, era “un recurso constitucional tomado ante acciones violentas nunca antes vistas en Bolivia”.Amnistía Internacional, la Defensoría del Pueblo de Bolivia, que presentó un recurso de inconstitucionalidad, y otras entidades desde el exterior criticaron el decreto supremo 4078, que eximía de responsabilidad penal a militares y policías si actuaban con “proporcionalidad y en legítima defensa”.La violencia comenzó el día después de las elecciones, tras las que fue declarado vencedor Evo Morales entre denuncias de fraude desde la oposición. La renuncia de Morales ha sido calificada como “golpe de Estado” por varios gobiernos y políticos latinoamericanos.El Gobierno provisional debe llamar a elecciones generales en un plazo breve que fijará el nuevo Tribunal Supremo Electoral que está siendo estructurado en el Congreso bicameral.