Soldados y vehículos militares blindados rodearon las puertas del Palacio de Gobierno de Bolivia, lo que el presidente de esa nación, Luis Arce, consideró un intento de golpe de Estado.En respuesta, el mandatario del país sudamericano llamó al pueblo a movilizarse contra el despliegue armado y horas después designó una nueva cúpula militar, relevando al comandante general del Ejército, Juan José Zúñiga, quien protagonizó la movilización contra el Gobierno y fue encarado por Arce. “Nadie nos puede quitar la democracia que hemos ganado”, enfatizó Arce en un mensaje nacional. “No podemos permitir que una vez más intentonas golpistas se lleven las vidas de bolivianos”. El destituido Zúñiga ya fue arrestado bajo cargos de terrorismo y alzamiento armado. Al momento de su captura, afirmó que Arce le ordenó sacar los “blindados” para “levantar su popularidad”. El general sublevado busca impedir el regreso del ex presidente Evo Morales al poder en 2025, aseguró que los militares pretenden “reestructurar la democracia” en Bolivia y exigió la liberación de opositores presos.La intentona militar se suscita en un contexto donde el partido gobernante, Movimiento Al Socialismo (MAS), está fracturado tras un enfrentamiento entre el actual presidente, que ganó las elecciones de 2020, y Evo Morales, el primer presidente indígena de la nación sudamericana que gobernó de 2006 a 2019 y quien anunció sus intenciones de reelegirse para 2025, aunque está impedido de ello por el Tribunal Constitucional Plurinacional. Sin embargo, el propio Evo Morales se apresuró a denunciar el acto de ayer, que fue rechazado por prácticamente toda la comunidad internacional, incluyendo México. El Presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó su “más enérgica condena al intento de golpe de Estado”, mientras que la presidenta electa Claudia Sheinbaum calificó los hechos como “un atentado contra la democracia”. Vehículos militares blindados y un numeroso grupo de soldados rodearon y embistieron ayer las puertas del Palacio de Gobierno de Bolivia, en su ciudad capital La Paz, en lo que el Presidente del país consideró un intento de golpe de Estado.El mandatario boliviano, Luis Arce, llamó al pueblo a movilizarse contra el despliegue militar y decidió horas después designar una nueva cúpula militar, relevando al comandante general del Ejército, Juan José Zúñiga, quien protagonizó la movilización de uniformados contra el Gobierno.“No podemos permitir que una vez más intentonas golpistas se lleven las vidas de bolivianos”, rechazó Arce en un mensaje nacional difundido en televisión.Tras el relevo en el mando militar, los uniformados y los vehículos militares blindados desplegados en la plaza frente a la sede gubernamental se retiraron del lugar. También el comandante Zúñiga se marchó del lugar, aunque horas después fue capturado.“Ha sido una jornada atípica en la vida de un país que quiere democracia”, declaró el presidente Arce, tras el inicio de la retirada militar. Y se refirió a “un intento de golpe de Estado por militares que están manchando el uniforme, que están atentando contra nuestra Constitución”. Reconoció, sin embargo, que Bolivia cuenta con soldados “que saben que nuestra Constitución política del Estado y el respeto a la normativa vigente es lo más importante”.“Deploramos actitudes de malos militares que lamentablemente repiten la historia tratando de hacer un golpe de Estado cuando el pueblo boliviano siempre ha sido un pueblo democrático”, recalcó y después salió a saludar desde el Palacio de Gobierno rodeado de sus ministros. El mandatario había denunciado “movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano” e hizo un llamado a respetar la democracia, mientras imágenes de televisión mostraban el despliegue de soldados y vehículos militares blindados frente a Palacio.En el ataque participó el comandante del Ejército con un mensaje: “Estamos molestos por el ultraje que hay, ya basta”. Sin dar más detalles de a qué se refería, habló en televisión de “ataques a la democracia”, que “pronto habrá un cambio de gabinete” y que “por ahora" reconocía al Presidente Arce como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas.Más tarde se vio a Arce encarando a Zúñiga. El mando militar justificó el despliegue militar porque “una élite se han adueñado del poder, del Estado”. Dijo, en medio de la tensión, que las Fuerzas Armadas quieren reestructurar la democracia y pidió la libertad de todos los presos políticos.Agencias Tras el intento de golpe de Estado de las Fuerzas Armadas contra el Gobierno de Bolivia, Tania Morales, defensora mexicana de Derechos Humanos, solicitó apoyo a las autoridades consulares para salvaguardar su vida y la de 16 mexicanos que se encontraban en el sitio.La Secretaría de Relaciones Exteriores emitió sugerencias a la comunidad mexicana en aquel país ante los disturbios y pese a que se calmó la situación.En la Ciudad de México también hubo acciones.Ante el intento de golpe de Estado en Bolivia, la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México redobló la vigilancia en el perímetro de la embajada del país suramericana.Aunque no hubo presencia de manifestantes, a la embajada ubicada en la calle Goethe 104, en la Colonia Verónica Anzures, de la alcaldía Miguel Hidalgo, llegaron elementos de seguridad para mantenerse alerta. El embajador de Bolivia José Vladimir Crespo Fernández, permaneció en el interior del edificio.En 180 años de independencia de Bolivia, el promedio es de un Gobierno cada 25 meses. Desde su fundación como república en 1825, ha sido un rosario de dictaduras militares y civiles, juntas de Gobierno, presidentes que no terminaron sus mandatos y decenas de golpes de Estado, sin contar medio centenar de alzamientos militares frustrados. “La comunidad internacional, no tolerarán ninguna forma de quebrantamiento al orden constitucional legítimo en Bolivia, ni en ningún otro lugar”.Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos. “Total apoyo a Arce, a quien identificamos como la auténtica autoridad democrática de ese pueblo y país hermano”.Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México. “Condenamos enérgicamente la inaceptable acción de fuerza de un sector del ejército de ese país”.Gabriel Boric, presidente de Chile. “Soy un amante de la democracia y quiero que prevalezca en toda América Latina”.Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil. “Es necesario convocar de urgencia a la treintena de integrantes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños para condenar los hechos”.Xiomara Castro, presidenta de Honduras. Luis Arce, presidente de BoliviaEs economista con una Maestría en Reino Unido. Por 18 años trabajó en el Banco Central de Bolivia y dio clases en universidades de Bolivia, Harvard y Columbia en Estados Unidos, y la Universidad de Buenos Aires en Argentina. En 2005, el ex presidente Evo Morales, lo invitó a su gabinete como ministro de Economía. Ejerció el cargo entre el 13 de enero de 2006 y el 24 de junio de 2017 y luego repitió entre enero y noviembre de 2019. Tomó el cargo en 2022, mediante un decreto del presidente Arce.Destaca “por sus conocimientos en inteligencia militar y por conocer los movimientos de diversos dirigentes políticos”.En 2014 enfrentó cargos por desvío de más de dos millones de dólares. Ayer la Fiscalía General de Bolivia lo detuvo y abrió una “investigación penal” contra todos los que participaron en la movilización “irregular” de soldados que intentaron tomar “por la fuerza” la sede del Gobierno. CT