El peronismo, la fuerza argentina que permea la vida política del país y que es difícil de entender fuera de sus fronteras, exhibió su músculo en las elecciones generales celebradas ayer, en las que su candidato, Sergio Massa, no sólo pasó a la segunda vuelta frente al libertario Javier Milei, sino que además fue el más votado.El actual Ministro de Economía, responsable por su cargo en el Gobierno del peronista Alberto Fernández de la grave situación socioeconómica por la que atraviesa el país, con una inflación interanual que trepó en septiembre al 138.3%, un nivel de pobreza del 40.1% y una brecha cambiaria superior al 200%, no se resintió en absoluto por estos datos.Frente al 21.43% que obtuvo en las elecciones PASO (primarias abiertas simultáneas y obligatorias), con el 97.40% de las mesas escrutadas ayer, Massa creció hasta un 36.61%, más de 6.6 puntos por encima de Milei, quien “pateó” el tablero político argentino cuando en agosto pasado se convirtió en el líder más votado de cuantos aspiraban a la Presidencia.Aunque todas las encuestas preveían un escenario de balotaje (otra elección entre ganadores) para el 19 de noviembre, el precedente de agosto, cuando ninguna consultora adelantó la victoria del candidato de La Libertad Avanza (ultraderecha), generó una gran incertidumbre ante el panorama de una Argentina dividida políticamente en tres tercios que dejaron las primarias.Lejos de estar afectado por perder ese primer lugar conseguido en agosto, Milei, quien obtuvo un 30.03% de apoyos, definió ayer como “un día histórico” por haber logrado, en sólo dos años de existencia de La Libertad Avanza, “disputar el poder a lo más nefasto que dio la historia moderna”, el kirchnernismo, del que dijo “es lo peor que le ha pasado a la Argentina”.El gran triunfador de anoche, Sergio Massa, reiteró una idea repetida a lo largo de la campaña, la de convocar “un Gobierno de unidad”, y afirmó que, con él, “la grieta se acabó” a partir del 10 de diciembre, cuando debe asumir el próximo presidente de Argentina.Sin la presencia en los festejos ni del presidente, Alberto Fernández, ni de la vicepresidenta, Cristina Fernández, el discurso del ministro de Economía sonó a pasar la página del kirchnerismo, el ala del peronismo vinculado al fallecido expresidente Néstor Kirchner (2003-2007) y la ex mandataria (2007-2015), al que él mismo se opuso y que le llevó a crear el Frente Renovador, tan denostado y criticado por sus oponentes electorales.Sin duda, la gran perdedora en estos comicios fue la candidata de Juntos por el Cambio (centroderecha), Patricia Bullrich, quien no fue capaz de retener el 28% de votos que logró su formación en las primarias, cuando la ex ministra de Seguridad compitió con el alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, pese a contar con ocho gobernadores provinciales y ganar en 2021 las últimas elecciones legislativas. Luego de los comicios de ayer en Argentina, la siguiente etapa es el balotaje, un procedimiento electoral que consiste en realizar una segunda vuelta entre los dos candidatos más votados cuando en una primera vuelta ninguno de los candidatos ha obtenido la mayoría requerida. De esta manera los comicios definitivos serán el 19 de noviembre y quien gane asumirá el poder el 10 de diciembre. El candidato ultraderechista a la Presidencia de Argentina, Javier Milei, quien ayer logró pasar a la segunda vuelta de los comicios, proclamó que ha hecho una “elección histórica”, y apeló al apoyo de los votantes de la coalición conservadora Juntos por el Cambio para vencer el 19 de noviembre próximo al candidato oficialista, Sergio Massa.“Haber hecho la mejor elección de la historia para el liberalismo en Argentina nos llena de orgullo”, destacó Milei, quien recordó que logró armar su movimiento en “solamente dos años” y ayer cosechó un triunfo que también le permitió obtener 40 diputados y ocho senadores.“Todos los que queremos un cambio tenemos que trabajar juntos”, dijo Milei pensando en el balotaje del 19 de noviembre y apelando a los votantes de la coalición Juntos por el Cambio (centroderecha) y su candidata, Patricia Bullrich, quien quedó relegada al tercer lugar.“Durante todos estos meses la campaña hizo que muchos de lo que queremos un cambio nos viéramos enfrentados”, sostuvo Milei.“Vengo a dar por terminado ese proceso de agresiones y de ataques. Estoy dispuesto a hacer tábula rasa, barajar y dar de nuevo con el objetivo de terminar con el kirchnerismo”, anunció el candidato libertario, "porque más allá de nuestras diferencias, dijo, lo que tenemos que entender es que enfrente tenemos a una organización criminal".Milei acusó a los seguidores de la vicepresidente y ex mandataria (2007-2015), Cristina Fernández, de defender “ideas populistas” y formar parte de un “Gobierno de delincuentes que quieren hipotecar” el futuro “para permanecer en el poder” y “profundizar la decadencia (de Argentina)”.“Hoy quedamos frente a la elección más importante de los últimos cien años”, aseguró Milei, e insistió: “Nunca hubo una elección más clara en nuestra historia”. CT