Donald Trump anunció un alza de aranceles por 200 mil millones de dólares (MDD) en bienes de importación chinos, pocos días antes del comienzo en Washington de una nueva ronda de negociaciones presentada como la última oportunidad para terminar la guerra comercial entre ambos países.Para aumentar la presión sobre China y obligarla a aceptar sus exigencias, el presidente estadounidense amenazó también con imponer aranceles a todas las importaciones provenientes de China, calculados en unos 539 mil 500 millones de dólares.“Durante 10 meses, China pagó 25% de aranceles a Estados Unidos por 50 mil millones de dólares en bienes tecnológicos, y 10% sobre 200 mil millones de dólares de otros bienes”, dijo Trump. “Ese 10% va a subir a 25% el viernes”, precisó, y justificó la medida por el hecho de que las negociaciones “no están avanzando suficientemente rápido”.El presidente estadounidense había decidido, a inicios de diciembre, suspender el aumento de esos aranceles debido a la reanudación de discusiones comerciales que hasta esta semana eran presentadas como “fructíferas” y con grandes posibilidades de llegar a buen puerto.El mandatario busca reducir el colosal déficit comercial de Estados Unidos con China, de 378 mil 730 millones de dólares en 2018.Además de una mayor apertura del mercado chino a los productos estadounidenses, exige de Pekín cambios estructurales que pongan fin a la transferencia forzada de tecnología estadounidense, al robo de propiedad intelectual o a las subvenciones a las empresas estatales.Para presionar a su socio, desató una guerra comercial a golpe de aranceles sobre más de 250 mil millones de dólares en mercancías.Además, su Gobierno advirtió que no aceptaría un acuerdo con China desfavorable a los intereses de su país y que las negociaciones no podrían prologarse eternamente.Pekín se había comprometido a aumentar sus compras de productos estadounidenses, fundamentalmente agrícolas y energéticos, pero la administración Trump sostiene que no ha cumplido con esa promesa.El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que Mark Morgan, jefe de la Patrulla Fronteriza en los últimos meses del gobierno de Barack Obama, será el nuevo director del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).“Me complace informarle a todos aquellos que creen en una política migratoria fuerte y justa, que Mark Morgan se unirá a la administración Trump a la cabeza de los hombres y mujeres trabajadores del ICE. Mark es un verdadero creyente y un Patriota estadunidense”, señaló el magnate. Morgan fue agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI) y estuvo al mando de la Patrulla Fronteriza hasta enero del 2017. Ahora volverá al Gobierno federal estadunidense para reemplazar al director interino del ICE, Ronald Vitiello, quien dimitió a principios de este mes. En una audiencia senatorial en noviembre de 2016, Morgan aseveró que eran necesarias cercas fronterizas y que funcionarían, aunque aclaró no se requieren en toda la extensión de la frontera con México ni son la única medida necesaria. En la audiencia senatorial, añadió que le gustaría un sistema de seguridad de alta tecnología, y agregó que se trataba de su punto de vista personal porque era “un patriota”.