Si el sexto programa de su Primera Temporada 2022 garantizaba la respuesta de público, el desempeño de la Orquesta Filarmónica de Jalisco (OFJ) en el mismo, la noche del jueves en el Teatro Degollado, satisfizo las expectativas. Aunque incluyó dos obras solamente y apenas duró poco más de una hora, al buen gusto -para el paladar conservador, sobre todo- con que fue confeccionado, se sumó un mayor acoplamiento del ensamble con su nuevo director artístico, José Luis Castillo, y un correcto desempeño de la soprano y el narrador solistas en “Egmont”, para que el aplauso del público que casi llenó la sala otorgara la nota aprobatoria.Schubert compuso y estrenó su Tercera Sinfonía, D. 200, en 1816, a los 19 años de edad. Como en las dos primeras -ejecutadas por la OFJ en veladas anteriores del presente ciclo-, la influencia de Mozart y Haydn es evidente. En esta, estupendamente interpretada, con respeto del tempo, notable sentido del equilibrio de secciones y pulcra dosificación de las dinámicas, sobresale por su gracia la participación de los alientos maderas en el primero y tercer movimientos (el trío de oboe, flauta y clarinete, muy particularmente), y de los metales en el cuarto. Además de los aciertos ya señalados, Castillo tuvo el de inhibir con su ademán enérgico los inoportunos -aunque entusiastas- aplausos del público al final del primer y segundo movimientos, aunque no en el tercero.De la música incidental para “Egmont”, de Beethoven, acerca del drama de Goethe sobre la rebelión contra las políticas de Felipe II de España en los Países Bajos, sobresale la formidable obertura que -Wagner dixit- “eleva a la sublimidad de la apoteosis”. Castillo, literalmente, la bordó, con un tempo contenido y un notable, por nítido, fraseo de las cuerdas en la celebérrima coda. En los pasajes forte, resplandecieron los espectaculares acordes -¡ya se les extrañaba...!- de Beethoven.La joven soprano Cynthia Sánchez, con buen timbre, pulcra entonación y encomiable intención dramática, contó en sus intervenciones con una respetuosa orquestación que atenuó sus limitaciones de volumen. Mauricio Cedeño, eficiente en lo general como narrador, mostró las dotes de actor teatral consignadas en el programa de mano... aunque por momentos su dicción careciera de claridad o resultara inaudible.El programa, como de costumbre, se repite este domingo, en la misma sala, a partir de las 12:30 horas.jagelias@gmail.com
