En esta semana, con horas de diferencia, se publicó la legislación secundaria que regulará la operación de las fintech en México y la noticia de que BBVA Bancomer despedirá a más de mil personas, como parte de su transformación digital. El futuro ya está aquí. Tiene un rostro que amenaza porque otros bancos tomarán decisiones similares, pero la película tiene un final abierto. El desenlace puede ser más feliz, depende de los empleos nuevos que generen las fintech y del impacto que tengan en el mercado.¿Habrá más o menos empleo en el sector financiero? Esa pregunta debería contestarse pronto, pero también en el mediano y largo plazo. Hay que hacer muchas sumas y restas, a partir de los datos de contrataciones y despidos; de empleos directos e indirectos.¿Qué pasará con el servicio al cliente y con los precios de los servicios financieros? La tecnología puede impulsar el acceso de millones de personas al circuito de ahorro y crédito, también puede producir mayor competencia. En teoría podría detonar una ola de cambios que traerán mejores servicios y menores precios. Muchas cosas pueden pasar, pero el proceso requiere esfuerzo, tolerancia al dolor y fe en el futuro.Hay nuevas realidades que conjuran a nuevos jugadores. En México operan alrededor de 260 empresas fintech, más que en ningún país de América Latina. Es un archipiélago de startups que aspiran a alcanzar valor multimillonario y convertirse en unicornios. No están solas. Desde otras galaxias, hay gigantes que han revolucionado otros sectores y quieren aplicar su “magia” al sector financiero. Google, Apple, Facebook, Amazon y Samsung, conocidas como GAFAS, ya están tocando la puerta y pisan fuerte. Están también empresas como Uber, Airbnb y las telefónicas que aspiran a convertir el conocimiento de sus clientes y sus prodigiosas bases de datos en la llave de acceso a los negocios financieros.¿Cómo maximizar los beneficios y minimizar los problemas? Éste debe ser uno de los principales propósitos de las políticas públicas. Todos los reflectores apuntan a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores porque a este organismo corresponden las tareas de supervisión de las empresas financieras, pero es obvio que no podrá sola: el reto es inmenso y requiere una acción coordinada que no tiene precedentes.La Procuraduría General de la República y la Secretaría de Seguridad Pública deberán combatir la criminalidad online. La Secretaría del Trabajo tiene el reto de reinsertar en el mundo laboral a los trabajadores que ahora no caben en la banca digitalizada. Los empleos que crean las fintech requieren habilidades que no necesariamente tienen los empleados que está desplazando la banca. Pueden ser miles o decenas de miles. No sólo es una estadística. Puede ser un drama, si no hay medidas que hagan posible la adaptación de trabajadores y empresas a la nueva realidad.¿Cómo se transformará el sector educativo? ¿Y los programas de capacitación y emprendedurismo? ¿Qué hará el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología? México es uno de los países más amenazados por la disrupción tecnológica. En riesgo están alrededor de 40% de los trabajos de oficina en el mundo, según un estudio de la Universidad de Oxford. En la mira, todos los empleos que realizan tareas repetitivas.Destrucción creativa le llamó a este tipo de procesos Joseph Schumpeter, el economista austriaco que explicó el capitalismo de manera magistral. ¿Cómo hacer para que predomine la parte creativa sobre lo destructivo?