La ciudad antigua más visitada del mundo, con cerca de cuatro millones de turistas al año, y joya de la corona de la arqueología en Italia ha estado cerrada todo el año de 2020 debido a la pandemia, al igual que todos los recintos culturales del país. Abrió el 18 de enero de este año, pero volvió a cerrar el pasado fin de semana al reforzarse otra vez las restricciones en la región de Campania. Sin embargo, en estos meses no han parado los trabajos arqueológicos y tampoco los descubrimientos. Además, acaba de darse el relevo en la dirección del proyecto: entró el alemán Gabriel Zuchtriegel, arqueólogo que antes estuvo a cargo de los trabajos en las ruinas de Paestum, en lugar del veterano Massimo Ossana. Hubo gran revuelo en el equivalente italiano del INAH y quejas de sus sindicatos (equivalentemente necios a los del INAH), porque el nuevo director es alemán y además muy joven.El mismo material volcánico que destruyó la ciudad en la erupción del Vesuvio del año 79 dC la protegió para la posteridad. A poco más de 20 kilómetros al sureste de Nápoles, Pompeya tenía cerca de 13 000 habitantes en una extensión de 66 hectáreas, de las cuales se han explorado unas dos terceras partes. También hay numerosos vestigios en la población de Herculano y en pueblos y casas campestres en la comarca. Las ruinas fueron descubiertas en el siglo XVI, pero sólo comenzaron a ser estudiadas formalmente en el XVIII, cuando el reino de Nápoles era gobernado por quien luego llegaría al trono español como Carlos III.Después de un largo descuido, en la segunda década de este siglo las autoridades italianas por fin reaccionaron y cobraron nuevos bríos los trabajos en Pompeya. En los últimos años se han multiplicado los descubrimientos importantes: esqueletos de personas y animales atrapados por la gigantesca explosión, lugares de trabajo con las herramientas de distintos artesanos y hasta los hechizos y artes de un brujo en su laboratorio. Entre los hallazgos muy recientes está un puesto callejero de comida (thermopolium) con todo y los fogones decorados con pinturas a fresco y con sus ollas completas, y dentro de éstas valiosa información sobre la comida de la época. También se ha recuperado por estas fechas un fresco importante de una casa patricia con una gran escena de cacería, que fue hallado a principios del siglo XX y se había dejado deteriorar hasta casi desaparecer. Pero el descubrimiento más reciente y más espectacular se dio a principios de 2021, cuando en los establos de la Civita Giuliana, una gran residencia campestre en las afueras de la ciudad, se halló en magnífico estado de conservación un carro ceremonial de cuatro ruedas, el primero de su tipo que se ha encontrado, a diferencia de los simples vehículos funcionales de trabajo o de guerra. El suntuoso carro, con asientos para dos personas, está hecho de hierro, bronce y estaño, y tiene un friso adornado con medallones con motivos eróticos de ninfas y sátiros. Muy probablemente se trate de un carruaje de aparato usado para procesiones nupciales. El periódico inglés The Independent publica un clip que vale la pena ver.**https://www.independent.co.uk/news/world/europe/pompeii-chariot-ceremonial-villa-civita-giuliana-b1808530.html